NATURALEZA DEL ALMA

Foro General de la Tercera Era
cristina
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por cristina »

Sigo:
E. 209,52-53. No os familiaricéis con mi palabra y al oírla no miréis por cuál portavoz os la estoy transmitiendo. Penetrad en ella y buscad su esencia para que vuestro análisis sea perfecto. La esencia es el sabor de lo divino.
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »


Saludos a Todos,
Saludos Cristina:

Continuando con el análisis de la "cátedra" que publicaste, en esta ocasión me referiré a los antecedentes que sobre ella nos compartes:

Cristina escribió:

Considero interesante el punto que mencionas, Cesar, para convalidar si esa cátedra es original o falsa.
El mismo autor del texto que citas -extraído del documento: Los hechos pocos conocidos de México- Joseph Zaragoza, fué quién antes de desencarnar me pasó entre otras cátedras originales inéditas, esa cátedra que desechas por su lenguaje.
Según me platicó, después de haber conocido el Tercer Testamento por internet residiendo él en aquél entonces en Europa, viajó inmediatamente al D.F. para saber más sobre Espiritualismo Trinitario Marioano. En ese viaje se acercó al archivo de Sergio Cerda y hizo copias de las cátedras inéditas que les pareció más llamativas que allí tiene la asociación. Pués la de Monterrey es una de ellas!


Al respecto, te comento que hace unos días me reuní en un par de ocasiones con Sergio Cerda, a quién agradecemos su disponibilidad para tratar estos asuntos. A fin de disipar las dudas que ha generado la cátedra que públicas, me tomé la libertad de preguntarle si recordaba haberle entregado cátedras a Joseph Zaragoza en aquella ocasión que refieres cuando lo visitó en la Ciudad de México, a lo cual respondió que NO recuerda haberle entregado copias de Cátedras inéditas, lo cual pone en entredicho la autenticidad de esta supuesta enseñanza, pues a decir del propio Sergio Cerda, nuestro hermano Joseph Zaragoza también visitó otros lugares como el templo de la fe, además de entrevistarse con varias personas, entre ellas la hija de José Pacheco. Por otra parte, me llamó la atención el testimonio de Sergio quien refiere que él llegó a la Asociación de Estudios Espirituales Vida Verdadera en 1973, es decir, cuando ya se había publicado el Libro de la Vida Verdadera.

Asimismo, refiere que los archivos que hoy en día se encuentran bajo su custodia, ya existían cuando el llegó a la Asociación, de modo que él no puede constatar la autenticidad de todos esos documentos, pues lo único que hizo fue trasladarlos al domicilio actual de la Asociación, debido a que el recinto El Redentor en el que originalmente se encontraban, fue cerrado intempestivamente, debido a que la Secretaría de Gobernación, amagó con clausurar el lugar y los propietarios del inmueble les pidieron la desocupación del mismo.

Asimismo, pudimos percatarnos que la mayoría de las cátedras que existen en la Asociación son transcripción a máquina de escribir, es decir, no se trata de documentos originales de aquellos tiempos, (al menos los que yo vi), de modo que debemos ser extremadamente cautelosos al publicar como "originales" toda esa serie de documentos, dado que no existe la certeza de que así sea, y más aún cuando se trata de copia de copias....

Por otra parte comentas:

Crisitna escribió:

Como ya expliqué anteriormente, Cristo sí se manifestó en el Tercer Tiempo varias veces autonombrándose "Jesús". De hecho en el LVV existen algunos párrafos, en cuales dice Jesús en vez de Cristo; estos párrafos ya fueron fueron muy criticados por varios espiritualistas,


Personalmente no he leído alguna Enseñanza en la que se diga que habla "Jesús de Nazaret"

Lo que sí recuerdo haber leído en innumerables ocasiones, es que habla el mismo Espíritu que se manifestó en Jesús.

¿Podrías citar algún ejemplo de lo que comentas?

Saludos



cristina
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por cristina »

Hola Cesar,

en verdad me entristece leer sobre la investigación que hicistéis junto a Sergio Cerda buscando más informaciones sobre nuestro hermano y amigo Joseph Zaragoza. A quién creer ahora? Cual palabra pesa más? Joseph ya desencarnó y yo sólo puedo decir, lo que recuerdo haber escuchado decirle. Tengo la copia en mano y te la pasaré escaneada...De hecho si tenéis la posibilidad de visitar el archivo de la asociación, por qué entonces no os tomáis el tiempo para estudiar un poco esas cátedras inéditas que están allí, y por qué no buscastéis la cátedra de Monterrey que estamos analizando?
Porque -me olvidé de decir en mi última participación- que considero, por el momento, uno de los más importantes criterios para validar las cátedras inéditas la que estén ó hayan estado en el archivo de la asociación que presida Sergio Cerda.

Acá te copio algunos párrafos del LVV, que confirman, según mi parecer,que Cristo se autonombró algunas veces Jesús (o fue nombrado así por algunos portavoces) en Su manifestación del Tercer Tiempo entre 1866 y 1950:

Este párrafo es el más elocuente:
E.89,22. Estoy irradiando mi luz desde el infinito y preparándoos para que mañana lleguéis a comprender mi palabra, porque vuestra fé no es aun verdadera; cuántas veces os habéis preguntado a vosotros mismos, si será verdad la irradiación de Jesús en este mundo y en este tiempo; despertáis en vuestro interior a una lucha en la cual mientras el espíritu os dice que sí es verdadera mi comunicación, el reacio cuerpo, con su corazón y su cerebro tan pequeño, duda, vacila y muchas veces niega mi presencia bajo esta forma.

Acá otro:
E. 48,43. En esta era ya no es Jesús hombre, el que viene hasta vuestro mundo en pos de los pecadores y necesitados, ahora es Jesús Espíritu, el que se manifiesta a la humanidad, para descubrir entre las multitudes de este tiempo a los nuevos discípulos que le han de ser fieles hasta el fin.

Etc:
E.51,6. Cada día los hombres abren nuevos surcos a la perversidad, y es allí en donde debéis dejar caer esta semilla, labriegos de Jesús, para que el ejemplo de vuestras buenas obras testifique la verdad de mi doctrina y aparte de su materialismo a vuestros hermanos.
> Acá, según mi comprensión, se refiere a los labriegos del Tercer Tiempo que lo estaban escuchando

E. 57,8. No olvidéis que nadie puede ser vuestro mejor cirineo que Jesús. Oíd mi palabra y dejadla que inunde de paz a vuestro corazón, ella será bálsamo sobre vuestras heridas. 9. Mi palabra unge, acaricia y fortalece. Aprendedla y sentidla, para que después unjáis con mi verdad y mi amor a los que encontréis enfermos en vuestro camino.
> Acá se puede referir a Jesús en el Segundo Tiempo, pero creo que se refiere a que Cristo es nuestro mejor cirineo

E.58,1. Este hijo mío a través de cuyo entendimiento os estoy entregando este mensaje, no pretende hacerse pasar por Jesús, es uno de los muchos portavoces que he preparado en este tiempo, para hacer llegar a vosotros mi palabra divina.
> Acá confirma que el portavoz hablaba en forma de yo=Jesús

E.58,13. Discípulos, estoy en vuestro corazón, para eso murió Jesús entre vosotros, para vivir por siempre en vuestro corazón. > Acá puede ser un fallo del portavoz, porque según nuestra comprensión es Cristo quien vive en nuestro corazón.

E. 58,65. A veces os contemplo así, débiles en la fé. Basta muchas veces que el pan sea escaso en vuestra mesa o que las puertas del trabajo por momentos se cierren, para que la duda se apodere de vosotros, olvidando que váis en la barca con Jesús, quien os dice también: ¡Ah hombres de poca fe!
> la barca del Tercer Tiempo sería la de la fé en la revelación del Espíritu Santo. En el Tercer Tiempo tenemos poca fé en la Palabra de Cristo... acá pero dice la barca de Jesús...

E. 62,42. Revestíos de mansedumbre, de piedad, de humildad, para que podáis ser reconocidos como mis discípulos. Si os comportáis verdaderamente como discípulos de Jesús, los mismos fariseos, cuando se acerquen a vosotros ocultos bajo un disfraz para sorprenderos, serán los lobos que se conviertan en mansas ovejas ante vuestro ejemplo.
> los discípulos del Tercer Tiempo deberían ser los discípulos de Cristo o del Espíritu Santo, no de Jesús... acá dice que debemos revestirnos con virtudes para ser reconocidos como Sus discípulos.. pero al final dice "discípulos de Jesús"

E. 84,19. Sed discípulos de Jesús y seréis hermanos de la humanidad. Sentid lo que hagáis y lo que habláis. Quien no siente mi amor en su corazón, prívese de hablar de amor, porque caerá en prevaricación.
> mismo comentario

E. 84,28 (...)Mas no penséis que todos los que dicen creer en Mí, confían en mi palabra o practican mi Doctrina. Veo en los hombres en el momento de la prueba, dudar entre perdonar como enseña Jesús
> enseña Jesús en el Tercer Tiempo? Es esa Su Palabra actual? o se refiere aquí mas bien a la Enseñanza del Segundo Tiempo?

E.86,63. No temáis llamar a la puertas de vuestro hermano cuando tratéis de salvarlo de un peligro, de consolarlo en una aflicción o de orientarlo en un trance difícil. Imitad a Jesús, el peregrino que llama por primera, segunda y tercera vez a las puertas de los corazones.
> no es Jesús que llama tres veces osea en los tres tiempos a las puertas de nuestros corazones, sino Cristo!

E. 94,16. Vengo a hacerme presente ante vosotros en este tiempo de lucha espiritual, porque fuísteis enviados al mundo para hablar de la Ley. Ya fuísteis liberados, ya os alejásteis de lo superfluo, avanzad ahora en el sendero como los verdaderos labriegos amados de Jesús. > debemos avanzar ahora... en el Tercer Tiempo... entonces somos labriegos de Jesús o de Cristo?

E.111,7. Aún son niños los hombres; mas la gran prueba que a ellos se acerca, les hará vivir en tan poco tiempo, que de esta infancia pasarán pronto a la madurez, y ya con el fruto de la experiencia clamarán: Tenía razón Jesús, nuestro Padre, vayamos a El.
> completa confusión: quien es verdaderamente nuestro Padre, Cristo o Jesús?

E. 124,28. Sed humildes ante vuestro Señor y seréis grandes en espíritu, no debilitéis ante las tentaciones del mundo y de la carne; los hombres os dirán, que mientras Jesús os hace postreros y humildes, ellos os harán primeros y grandes en la tierra, mas no les creáis. > creo que aquí se refiere a la Enseñanza del Tercer Tiempo....

E. 130,1. El mundo se conmueve con el recuerdo de mi pasión. En esta tarde, en que recordáis aquellos sucesos y en que desciende mi rayo divino a dar quietud al espíritu de la humanidad, Jesús os contempla conmovidos.
> Jesús sigue contemplándonos desde el Más Allá?

E. 135,9. Nunca os amedrentéis por el peso de la responsabilidad que he puesto en vosotros; mas pesa el fardo del pecado. Es más doloroso el abismo con sus tinieblas que la luz que existe en la cumbre de la montaña donde mora el Maestro. Nuevamente os digo que el "yugo de Jesús es dulce".
> se refiere al yugo de Jesús del Segundo Tiempo o al yugo espiritual de la vida que nos recomienda Cristo en Su Enseñanza eterna?

E. 138,76. A medida que mi enseñanza os haga mayores revelaciones, vosotros buscaréis la forma de corregir vuestros errores, de regenerar vuestra vida y apartaros de todo vicio y mala inclinación. Si llegáis a ser limpios, cuando habléis de mi obra tendréis que ser creídos y considerados como discípulos de Jesús, que verdaderamente predican su enseñanza con ejemplos y obras de amor. Esa es la vestidura de gracia que debéis llevar siempre y por la cual podéis distinguiros entre vuestros hermanos.
> al principio de este párrafo habla de "mi enseñanza que da mayores revelaciones." El que escucha y sigue esas revelaciones es discípulo de Cristo, no de Jesús...

E.141,25. Oh pueblo, ya se acerca el día en que voy a dejar de hablaros en esta forma; aprovechad mis enseñanzas para que podáis resistir los torbellinos que os amenazan. Los hombres llegarán hasta vosotros para pediros pruebas de que hablasteis con Jesús y que de El recibisteis sus lecciones.
> Habla del final de la comunicación a través del entendimiento humano y dice que los hombres dirán que los que asistieron a estas divinas enseñanzas hablaron con Jesús... lo que confirma, que Cristo en algunas ocasiones, dependiendo talvez del portavoz, se haya autonombrado Jesús

E. 141,78. No os estoy reprendiendo, sólo os despierto con amor para deciros que no es difícil trabajar en la campiña de Jesús y que debéis perseverar en vuestra enmienda.
> la campiña del Tercer Tiempo es de Jesús?

E. 142,60. En este día de gracia os recibo; sois los párvulos de Jesús, siempre pequeños ante la grandeza de mi doctrina. Avivo la luz de vuestra lámpara y aparto las espinas que vosotros mismos habéis cultivado para hacer sangrar vuestras plantas. Recibid el bálsamo que cura todas las heridas y con ello dejad de sufrir.
> somos párvulos de Cristo, pero aquí dice "...de Jesús"

E.21,75. Esta fue mi promesa a través de Jesús y os la he venido a cumplir. Dije en el Segundo Tiempo a mis apóstoles: "Si no me fuese, no vendría a vosotros el Espiritu Consolador". Quise decir: si Yo Jesús, en cuerpo , no me fuese, no podría venir a manifestarme a vosotros en espíritu. Pues el Espíritu Consolador, el Espíritu Santo que os prometí, soy Yo, es mi palabra, es mi mensaje de amor.
> un ejemplo interesante...

Pero interesante, ante todo esto, me parecen los siguientes párrafos que hablan sobre el Cordero Inmolado. En un párrafo dice que Jesús fué el Cordero Inmolado (E.48,38), y en otro dice que fué Cristo (E. 91,3):
E.91. Conmemoráis en este día mi entrada en Jerusalén; evocáis los tiempos en que a través de Jesús viví entre vosotros. Hoy volvéis a sentiros fuertes ante mis nuevos prodigios y hacéis público vuestro testimonio de que este Maestro es el mismo que os habló en el Segundo Tiempo y Yo os digo, que no olvidéis lo que hicísteis con Jesús, para que no lo repitáis en este tiempo. Yo sabía que después de vuestro júbilo, íbais a debilitar ante la palabra de los sacerdotes y que vuestros cantos de ¡hosanna! los íbais a cambiar por los de ¡Crucificadle!
2. ¡Oh mis hijos, que no habéis reconocido mis manifestaciones a través de los tiempos ni velásteis esperando el cumplimiento de mis profecías!
3. Yo fui el Cordero inmolado en aquella Pascua que celebró mi pueblo. Sólo después, cuando pasó el tiempo, conocísteis la esencia de mi Doctrina y el por qué de mi sacrificio y entonces llorásteis y os arrepentísteis por no haberme reconocido.


E.45,7. Mientras el cuerpo del Maestro estuvo en el sepulcro, el Divino Espíritu iluminó las moradas en donde justos y pecadores le esperaban, para que su caridad les llevara a una nueva era; porque la sangre del Cordero no sólo trazó el camino de su evolución espiritual, a los seres de este mundo, sino también a los del valle espiritual. Cumplida en todos aquella misión de amor, el cuerpo de Jesús se fundió con el Espíritu Divino, de la misma manera que tomó forma humana.
8. Si el cuerpo de Jesús no brotó de la tierra, ¿Por qué había de rendirle tributo como todos los hombres? El os había dicho: "Mi reino no es de este mundo"
.


E. 48,38. En aquel tiempo, José de Arimatea abrió las puertas de su casa para que en ella el Maestro, en unión de sus discípulos, celebrase la Pascua, cuando no sabían aún que el Cordero que sería inmolado en esa fiesta iba a ser Jesús.

E.21,16. En vez de recordarme en los tormentos y en la agonía de Jesús ¿Por qué no os acordáis de mi resurrección, plena de luz y gloria? > quien resucití aquí según este párrafo? Cristo o el cuerpo de Jesús?

Personalmente yo también creo que Jesús se fundió con el Espíritu Divino, osea con Cristo, y por eso no me causa confusión que en el LVV o Tercer Testamento aparezcan estos párrafos con el nombre de Jesús, por lo cuanto no me causa duda alguna leer en cátedras inéditas a Jesús dando cátedra.
eduardochavez
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por eduardochavez »

Saludos a todos:
Muy interesantes vuestras participaciones, Cristina, César. Me parece que en el fondo los dos afanes son el mismo, acceder a la esencia de la Palabra que nuestro Padre nos legó y desechar, lo que le agregamos por las razones que hayan sido. Afán con el que concuerdo.
Primero me llama la atención la investigación que hizo César con Sergio Cerda. Porque me gustaría añadir que, el año pasado en conversación informal él nos relataba a Oscar Ivory y a mi, la forma en que se convirtió en el responsable de la impresión del LVV y su distribución. Haciendo énfasis en que nunca recibió documentos originales, porque éstos, según le dijeron, habían sido quemados sin darle ninguna explicación. Sólo tendría a su disposición la versión impresa para seguirla reimprimiendo. Entiendo que recibió un trabajo previamente, pulido, previamente editado, previamente ¿mejorado? en todos sentidos para seguirlo imprimiendo. Lo cual no explica las diferencias y modificaciones que existen entre las diferentes ediciones.

Por otra parte, el asunto que aborda Cristina, con relación a cierta confusión que al parecer percibimos, sobre la identidad de quien habla en el LVV, porque de pronto habla nuestro Padre, luego Jesús, luego Cristo, luego el Espíritu de Verdad, etc. que, aunque sabemos que se trata en todos los casos del Espíritu de Nuestro Padre, a veces resulta confuso. Cabría señalar, que he visto por lo menos en una cátedra manifestarse al mismo tiempo (en el mismo día) "los espíritus" de María, Jesús y Padre Eterno que, aunque sabemos se trata del mismo Espíritu, se manifestaban de manera distinta representando diferentes papeles. Por ejemplo: María y Jesús, arrodillados y llorando delante del Padre Eterno, intercediendo por nosotros. Al parecer esta forma de manifestación tripartita era común en los recintos anteriores a 1950 (y muy común en los actuales), particularmente en fechas especiales de conmemoración o los días primero de cada mes. Pienso que las cátedras originales reflejaban este hecho y muchos más aspectos contextuales que simplemente fueron borrados por los editores, en aras de una cierta uniformidad. Lo que no entiendo es porque todo este proceso de edición impresión y reimpresiones debía ser ocultado en vez de ser transparentado, como fue la manifestación de nuestro Padre que lo hacia a plena luz del día.

Finalmente, coincido con Cristina, la fusión de cuerpo y espíritu es una de las grandes enseñanzas del Maestro, de nuestro Padre. Cuerpo y Espíritu se convierten en un solo Ser en Cristo o JesúsCristo. Y eso es lo que nos pide el Padre, que materia y espíritu actúen como una sola unidad.
cristina
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por cristina »

Hola Eduardo, hola Cesar,

si se está poniendo muy interesante este caso...
Yo creo que quemaron las transcripciones de las plumas de oro, porque al transcribirlas a maquina de escribir, al mismo tiempo las repasaron y depuraron de todo fallo que -talvez- haya cometido la pluma de oro y tambien el portavoz, fallos que saltarían entonces al ojo. Y para que esos fallos no transcendieran hasta nuestros dias, pues las eliminaron, ya que la esencia estaba guardada en las copias hechas, al menos eso deduzco.

Tuve el impulso de comparar el contenido de esta cátedra de Monterrey (del 8.2.1943) con las Enseñanzas del LVV y encontré, que ha sido integrada en la E. 89.

Comparación entre la E. 89 y la cátedra inédita de Monterrey del 8.2.1943
> las palabras que fueron extraídas de esta cátedra y SINTETIZADAS en los párrafos de la E. 89 las subrayé para que fuesen mejor visibles

3. Estoy entre vosotros irradiando desde los altos planos de la luz mi Doctrina, mi Doctrina sobre toda vida humana, preparándote para el mañana, para que comprendas mi palabra, el verdadero significado de las palabras del que os ha amado siempre y del que a través de la luz llega hasta ti.
4. Eres más duro que la carne y eres más carne que espíritu, tu preguntas con curiosidad: "Es acaso la irradiación de Jesús de Nazaret en este mundo y en este tiempo?" Y hay un si del corazón y un no, del reacio cuerpo, que te aparta de mí y de mi Padre Celestial, que está en el universo diciéndote: "Conóceme, que no debes dudar más, porque el aire que respiras tiene efluvios del Espíritu Santo, porque en él hay Luz de perfecta divinidad."


LVV-22. Estoy irradiando mi luz desde el infinito y preparándoos para que mañana lleguéis a comprender mi palabra, porque vuestra fé no es aun verdadera; cuántas veces os habéis preguntado a vosotros mismos, si será verdad la irradiación de Jesús en este mundo y en este tiempo; despertáis en vuestro interior a una lucha en la cual mientras el espíritu os dice que sí es verdadera mi comunicación, el reacio cuerpo, con su corazón y su cerebro tan pequeño, duda, vacila y muchas veces niega mi presencia bajo esta forma.

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6. Yo te bendigo si crees en mí, más también si dudas te bendeciré, porque todos son hijos del Altísimo. Yo no vengo a escoger en este tiempo; sólo vengo a regar luz por el mundo, no tengo preferencia, os amo a todos por igual, voy por el mundo sin escoger las almas y por este mensaje daré claridad desde las alturas dejando mi estela de espiritualidad. La luz del nuevo día se anuncia y ya las alondras cantan melodías de amor. Yo soy el Sembrador de luz sobre la tierra y conozco el tiempo para sembrar y recoger. No sabéis perdonar y queréis olvidar que este mundo es principio de dolores, que es mundo de agitación, que es de confusión y de lucha: de lucha de la carne con el espíritu, de la luz con la sombra, de la mentira con la verdad.

LVV-23. No temáis porque lo mismo os bendigo si creéis y si me amáis, que si dudáis de Mí y os alejáis del camino. No tengo preferencias ni hago distinciones con nadie, solo vengo a dar la luz a la humanidad para que la verdad sea en todos.
24. Este mensaje, que al abrirse el Tercer Tiempo os he enviado, os dará claridad y certeza sobre lo que encierra mi amor divino y lo que podéis esperar de mi justicia perfecta.
25. Soy el sembrador de luz y conozco perfectamente el tiempo más propicio para sembrar y cosechar. Hasta después de que los vientos hayan sacudido los árboles y secado la tierra, es cuando llega la hora de sembrar y éste es precisamente el tiempo en el cual los vientos están azotando al mundo y desnudando los árboles. Tiempo de dolor es éste en el que comenzáis a beber vuestro cáliz de amargura. La lucha de la materia y del espíritu se aproxima, la batalla del bien en contra del mal, de la luz contra la tiniebla, de la verdad en contra de la mentira.

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7. Escrito está que cuando los hombres se encuentran a la altura de la mayor perversidad, cuando el mundo esté perdido en pecado, Dios os dará la luz en el mundo.

LVV-26. Escrito está ha mucho tiempo que, cuando la humanidad se encontrase en su mayor altura de perversidad, cuando el mundo se encontrase perdido en el pecado, vuestro Dios llegaría a daros su luz.
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11. Yo os digo, mi divina tarea espiritual, es salvar a las almas, tú no sabes el significado de estas palabras:" Salvador del Mundo".
LVV-27. Mientras en este tiempo los hombres triunfan matando, Yo venceré dándoles la vida. Mi divina tarea es salvar a los espíritus, vosotros aún no habéis llegado a comprender lo que quiere decir Salvador del Mundo.
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12. La vida surge de tu adormecido corazón sin que en ella me sientas, te extraña que esté irradiando en la tierra? Y que de extraño tiene que el redentor esté dando redención a las almas, que redima a través del pensamiento convertido en luz Mesiánica, que diga a los hombres, que está vivificando, cuál es el camino de la verdad. Que de extraño tiene que el Pastor busque a las ovejas que gimen extraviadas? Si antes de que el mundo fuera ya te amaba, ya estaba pensada la salvación por el Poder del Sacrosanto Amor, por el Poder que no tiene dificultad.
13. Cuando me manifesté en el cuerpo de Jesús, me diste la Cruz por trono


LVV-28. La vida palpita en vuestro corazón, sin que me sintáis en ella y sin embargo aún os extrañáis de que mi Espíritu irradie luz sobre vuestro entendimiento. ¿Qué de extraño tiene para vosotros que el Salvador venga en busca de los espíritus extraviados? ¿Acaso os habéis sorprendido cuando un pastor anda en busca de la oveja que se le ha perdido?
29. Antes de que hubieseis sido creados, Yo sabía que me desobedeceríais y que vendría a salvaros por medio del amor, sabía que mi amor divino habría de encarnar en Jesús a quien le darían los hombres por trono una cruz.
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13. Cuando me manifesté en el cuerpo de Jesús, me diste la Cruz por trono y entonces te enseñé toda la fuerza y toda la potencia de mi Espíritu, en el poder del amor salvador. Cuando me diste la Cruz, no limité mi amor, dejé que los hombres regasen mi sangre que corría cual manantial de amor purísimo, entonces dí amor sin taza al mundo entero y antes por las arenas candentes del desierto posé mi planta para buscar las almas, levanté la Lázaros, perdoné Magdalenas y a la mujer adúltera dije: "Levántate y no peques más!"
14. Y piensas que mi Espíritu no desciende a la materia, que no son mis rayos en disminuicion de la potencia para que se conviertan mis pensamientos en palabras sonantes, para tu comprensión; si, yo me manifiesto como luz que envuelve la tierra, como hálito sublime para mitigar la sed espiritual que te devora, para decirte, es llegado el tiempo en que se hagan en el hombre las manifestaciones de las potencias espirituales, el tiempo para espiritualizar tu ser, de que conviertas la fe en potencia, la potencia en pensamiento y el pensamiento en voluntad.


LVV-30. Fuí en Jesús para enseñaros la fuerza del amor, que no tiene límites, el cuál derramé a cada instante en palabras, en bálsamo, en sangre, en perdón; el amor que levantó Lázaros y perdonó Magdalenas. Aun así, pensáis que es imposible que haya vuelto al mundo, porque en él me disteis muerte y retorné al seno del Padre, sin entender que ya no debéis sentirme e imaginarme en cuanto hombre y si solo en cuanto amor.
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16. Yo conozco tu corazón y conozco que muchos me han aceptado y muchos otros no, más yo os digo en verdad, analizad mi palabra. He tomado materia ignorante para derramar luz y claridad divina, porque las alondras ya anuncian el nuevo día. Sé bien que muchos están diciendo: "Jesús de Nazareth, es tu e irradiación?" Hombres de poca fe, si el sol irradia su luz, si las estrellas irradian sobre la tierra, porque el Mesías Verdadero no? Si tú mi bien amado, también estás vibrando con la potencia de tu vida, porque yo no me puedo servir de la antena humana?

33. Muchas han sido las lecciones en las que os he explicado mi irradiación espiritual sobre los hombres y aún persiste vuestra duda. Quisiérais que os diera pruebas materiales, como aquellas que os mostré en el Segundo Tiempo, las que me pidieran los hombres de poca fé para poder creer.
34. Si el sol irradia luz de vida sobre toda la Naturaleza, sobre todas las criaturas, y si las estrellas irradian también luz sobre la Tierra, ¿Por qué el Espíritu Divino no había de irradiar luz sobre el espíritu del hombre?

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18. Soy el Gobernador Espiritual de este Planeta y a todas las almas debo salvar para decir a mi Padre: Padre, lo que me has encargado lo he cumplido, dirigiendo a las almas por todos los caminos, por todos los senderos, tendiendo la mano a todos los que buscan la verdad y la luz y que me buscan a través de las diversas religiones que quieren. Porque en verdad, donde quiera que exista la vida, existe la manifestación de Dios, dando la vida; el Espíritu de Amor, os dice: quien tenga ojos vea, quien tenga oídos oiga lo que el Verbo dice a los hombres en este tiempo, en que la ciencia quisiera enfrentarse con el mundo y que Él dice: Detenéos, dejad que las luces deificadas manifiestan la claridad de la paz, dejad que la claridad del amor brille, dejad que la corriente del amor corra por el mundo. Brindaré a los hombres la claridad del amor sobre la tierra, derramaré el amor y enseñaré que sin amor excelso no hay salvación posible.

35. Vengo a deciros ahora: Humanidad, deteneos, dejad que la luz de la justicia que procede del amor, se extienda por el mundo, dejad que mi verdad os persuada de que sin amor verdadero no alcanzareis la salvación.
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seguiré....
cristina
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por cristina »

2a parte: Comparación de la E. 89 del LVV y la catedra inédita de Monterrey, del 8.2.1943

23. Dejad destellos luminosos al caminante, sentíd a Dios en la creación, en el alma, que en la más alta consciencia de la vida espiritual encontrará mi Padre su mejor templo y allí morará Jesús, viviendo en las cimas de las mentes, en las cumbres de la consciencia diáfanizada del hombre, que sea más espíritu que carne y más consciencia que sombra.

LVV-39. Paso a paso, instante por instante, se va acercando el tiempo destinado para que Yo venga a morar en mi santuario, el que hasta ahora ha permanecido cerrado en el corazón del hombre.


24. Así como el viento, la brisa y el sol os acarician, acariciad vosotros a la humanidad entera, a las aves heridas, a todo aquel que pide favor, porque el que os pide favor es aquel que os concede la gracia de que seáis útiles a la salvación de vuestra alma y os concede la gracia de que le socorráis, para haceros misericordiosos, para asemejaros a mi Padre; porque el hombre ha nacido para regar por el mundo la semilla de la utilidad, para dejar en el camino la huella de la caridad y del amor perfecto, debéis ser humildes y misericordiosos, para que dejéis en el camino luz de amor, el que te pide, es quien te favorece, utilizándote; miente quien diga que hace favor al hacer la caridad, apenas cumplís con vuestra obligación, es una oportunidad la que él os brinda, para que haciendo el bien por el bien mismo, sembréis la semilla y recojáis en el Reino de mi Padre, el fruto de la simiente.

LVV-40. Quien piense que para acercarse a Mí deberá dedicar su vida tan sólo a dar, sin esperar recibir, a sacrificarse sin ninguna compensación inmediata, está en un error; porque siendo como sois imperfectos y pecadores, el que os busque para pediros será quien venga a favoreceros, porque al utilizaros os da la oportunidad de que os acequéis a vuestro Padre por el sendero de la caridad.


26. Los que tengan el corazón adormecido recibirán mis bendiciones, porque yo me sirvo de la Luz y el mundo y la luz brillarán, cuando ellos caminan por el sendero que regula los actos de los hombres y pueden dejar una huella de blancura; cuando despierten y tengan luz nunca jamás buscarán otra, porque mi luz, es la luz de los mundos, la luz que siempre ha sido sin dejar de ser nunca, la luz que te llama, que te habla, que te espera y que te dice: Si posiblemente estás esperando la irradiación de Jesús de Nazareth, para curar los subsesos, para sanar paralíticos y ciegos en medio de las multitudes, en verdad te digo, que el tiempo en que me manifesté como hombre pasó y hoy es tiempo de que se cumpla mi palabra:" Cuando el hombre esté a la altura de la mayor perversidad, mi luz volverá a disipar las tinieblas y las dudas en este mundo."

LVV-41. Id pues, discípulos, por el camino del mundo, para que digáis a vuestros hermanos que en este tiempo, si acaso están en espera de mi llegada, no me verán en cuanto hombre; si están esperando en la Tierra la venida del Maestro para presentarle a los ciegos, a los paralíticos, a los incurables y a los poseídos como en aquel Segundo Tiempo, no me verán llegar humanizado, porque mi presencia entre los hombres es completamente espiritual, pero sí pueden presentarme a sus enfermos, contarme sus cuitas y amarguras, porque me encuentro cercano entre todos mis hijos.


27. Yo os digo: Prepararé a unos de vosotros y serán cual primera piedra de mi Doctrina y en este lugar brillará la luz de Dios, en el camino será mi Luz con vosotros y curaréis en mi nombre y mis marcados convertirán el agua en bálsamo y sanarán los enfermos, porque esta es mi voluntad y la de mi Padre Celestial, que está en la tierra y en el cielo y he aquí, en verdad os digo, el Poder del Amor, se manifiesta en el hombre y vosotros en el Amor del Padre, de la Creación. Sanarán los enfermos y en el nombre del Altísimo aplacaréis los vientos, si estáis en preparación.

LVV-42. Esta luz, esta palabra, por medio de la cual os he estado enseñando mi Doctrina en este tiempo, os mostrará la forma espiritual y simple con la que podáis sanaros unos a otros, consolaros y ayudaros en la caminata de la vida, será entonces cuando los enfermos alcancen su curación por el amor de los unos a los otros.


35. Si, el Dios de la Misericordia y del Amor, es aquel que no castiga, que no castiga jamás, que ama intensamente a sus hijos, pero jamás les envía castigos; vosotros solos hacéis con vuestras obras las espinas y los abrojos que al pisarlos sangran la planta, derraman lágrimas vuestros ojos por vuestras obras, por eso lloráis, por ellas sufrís, pero mi Padre es perfecto en Justicia, en Sabiduría, en Poder. Mi Padre Celestial no castiga a la humanidad, porque son tus actos y tus pensamientos malos, porque son malas tus palabras y tus obras malas, por eso lloras y por eso gimes, más mi Padre Celestial, es perfecto y la mortificación y la ira no surgen de él. Vosotros mismos encendéis el fuego y después clamáis al cielo, que se apague, no sois capaces de apagar lo que sois libres de encender. El fuego de la pasión lo podéis apagar con el agua clara de las virtudes y si no podéis apagarlo con buenas obras y si no tenéis lágrimas, apagadlo con sangre del corazón, apagad el fuego de las pasiones impuras convirtiéndolo en fuego grande de Amor Sempieterno, sublime y, eleváos, eleváos y triunfad por sí mismo, convertíos en manifestación viviente de Amor Sacrosanto y seréis a semejanza mía en la tierra.

LVV-43. Sí, humanidad, habéis encendido el fuego de las pasiones, y después habéis clamado al Cielo para pedirle que no os castigue, sin comprender por vuestra ceguera, que el Padre no castiga; sois vosotros los que no habéis sabido encontrar el camino para llegar a apagar el fuego de vuestros odios y de vuestras guerras, con el agua transparente de la regeneración y de la virtud, porque no habéis llevado en vosotros esa virtud. y tenéis que empezar por apagar el fuego con vuestras lágrimas y aun con sangre.


37. Las puertas del Cielo, alto Reino de la Consciencia, se cerrarán al soberbio, el orgulloso no pasará su cabeza, más cuando se haya humillado yo lo ensalzaré, que cuando renunciéis a la vanidad lo tendréis todo, porque nada os faltará, no sabéis humanidad los poderes que hay en vosotros.

LVV-45. Haced de la humildad una de vuestras mejores aliadas para alcanzar la elevación, porque las puertas del Cielo, que es el reino de la conciencia, se encuentran completamente cerradas para el soberbio. Nunca ha pasado por ellas, ni logrará pasar el soberbio, pero cuando éste se torne en humilde, Yo seré el primero en ensalzarle y será mi caridad la que le abra la puerta de la eternidad.



38. Con que potestad pedís estas cosas, acaso os sentís dignos para reclamar estas cosas? Yo os hablo así, porque mi Padre Celestial dice: Salva a las almas y cual luz que de Oriente surge, entrega mi Doctrina de Amor y de Perdón. No me pidáis pruebas con intención impura, que a los que me piden con el corazón humilde y llenos de buena voluntad les entregaré las llaves de las puertas de mi inalterable, inmutable y resplandeciente verdad. Con el corazón lleno de buena voluntad y el entendimiento lleno de pensamientos sanos, con intención limpia os entregaré lo que necesitéis, pero si no, con que autoridad me pedís, si yo, os he visto negar la caridad al que os la ha pedido? Yo he visto que no siempre pensáis bien, que no siempre habláis bien y en verdad, solamente se puede pedir por los propios merecimientos.

LVV- 46. Hablándoos así a través de entendimientos incapaces de inspirarse por sí mismos, os doy la mejor prueba de mi presencia y de la verdad de mi irradiación. ¿Por qué entonces me pedís pruebas con intención impura? Ved que acabo de deciros que sólo los humildes penetrarán en mi Reino. Sed humildes y podréis comprender el amor y la caridad que hay en mi palabra.
LVV-47. No me exijáis, porque entonces os preguntaré con qué autoridad lo hacéis, cuando Yo os he visto negar la caridad a quien os la ha pedido.


39. Las virtudes deben de florecer en ti, como divina antorcha de la gracia y de mi Doctrina. No temas confesarme, dudas de mi? Vuelve una y otra vez a analizar mi enseñanza y aprenderás mi lección, que los que tienen temor no sirven para sembrar el Evangelio de amor en la redondez del mundo, porque el temor corresponde a la carne y las cosas del espíritu son imperecederas.

LVV-48. Dejad que mi palabra florezca en vuestro corazón, aún no sabéis cuántos tendréis que convertiros en mis sembradores; haced a un lado el temor que sintáis ante los juicios de la humanidad, porque los que sintieran ese temor no me servirán para sembrar esta simiente en el corazón de sus hermanos. El temor es tan sólo una debilidad de la materia, en cambio la confianza y la fé son atributos del espíritu.


44. En la tierra mi amor te demostró grandes cosas; las zorras tienen cuevas, las aves tienen nidos y el Hijo del Hombre, no tuvo donde reclinar su cabeza, y, hoy te pido que abras las ventanas de tu corazón y me lo niegas... Más el Hijo de Dios, sigue esperando y contando y muy pocos entendimientos quieren la Luz de mi palabra.

LVV-49. Pensad que habéis sido muy fríos ante el amor de Cristo, vuestro Maestro y Señor, y Yo os pregunto: ¿Cuál ha sido la causa de esta frialdad?
LVV-50. Os dije en el Segundo Tiempo: Las zorras tienen cuevas, las aves sus nidos y el Hijo de Dios no tiene donde reclinar su cabeza, y ahora que estoy llamando a las puertas de vuestro corazón no queréis abrirme, pero Yo haré de todos vosotros mis discípulos, porque mi amor jamás será vencido.

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Creo que la comparación de la E. 89 y la catedra inédita de Monterrey, del 8.2.1943 mostró claramente que esta cátedra proviene de un recinto que era Espiritualista Mariano Trinitario en Monterrey y que fué aceptada como Irradiación del Divino Maestro.
Como ya he observado en la comparación de las cátedras inéditas del recinto El Redentor (1948-1950), también esta cátedra fué integrada en partes (párrafos 3-44) y sintetizada en una Enseñanza del LVV, en este caso en la E. 89, párrafos 22-50. En el analisis de otras Enseñanzas del LVV me dí cuenta, que algunas veces una Enseñanza puede contener una ó más catedras inéditas, que fueron dadas en los domingos que se seguían.

Deduzco que nuestros hermanos que editaron el LVV leían las cátedras transcritas a maquina de escribir y extraían las partes con más esencia para formar con ellas Enseñanzas enumeradas. Además muchas veces sintentizaban la esencia en sus propias palabras y según el conocimiento que iban adquieriendo en el estudio y analisis de otras catedras y otros recintos. Porque cada recinto tenía su propio nivel de elevación y conocimiento espiritual y debió haber sido un gran trabajo hecho por el grupo de recopilación el nivelar tantas catedras en un mismo nivel elevado.

Espero que este trabajo haya sido bastante convincente para mis hermanos, especialmente para Cesar y sus compañeros de estudio.
Y si están de acuerdo, con lo que he deducido, podríamos seguir con el analisís del termino del alma, que aparece en esta catedra más amenudo que en las catedras inéditas que he visto del recinto El Redentor. Por eso, esta catedra me parece ideal, para seguir con el analisís del alma.

Saludos fraternales, con el deseo de que nuestro trabajo sea en pro de nuestra unificación!
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

Saludo a todos mis hermanos que leen este foro.

Cristina escribió:
Creo que la comparación de la E. 89 y la catedra inédita de Monterrey, del 8.2.1943 mostró claramente que esta cátedra proviene de un recinto que era Espiritualista Mariano Trinitario en Monterrey y que fué aceptada como Irradiación del Divino Maestro.

En las últimas participaciones se ha venido analizando una “cátedra inédita” fechada el 8 de febrero de 1943 que supuestamente proviene de un recinto de Monterrey, Nuevo León, México, en la que se menciona la palabra “alma”, cátedra que nuestra hermana Cristina considera auténtica, señalando que la misma fue recopilada para formar el Libro de la Vida Verdadera.

Considero que existe evidencia suficiente para demostrar que dicha cátedra es falsa. Veamos:

a).- La cátedra en cuestión aparece fechada el día 8 de febrero de 1943, fecha que, como lo hizo notar Eduardo Chávez, correspondió a un día lunes, y hasta dónde sabemos, nunca se empleó el día lunes para entregar “cátedras,” a menos que correspondiera a un día primero mes u otras fecha predeterminadas.

b).- Existen evidencias que dan cuenta que el Libro de la Vida Verdadera fue formado por Cátedras provenientes de los recintos La Fe, El Medio Día, El Redentor y Simiente de Sión. Así lo indican los testimonios de nuestros hermanos Pedro Jiménez Montes, (publicado en este foro) y Sergio Cerda (responsable de la edición del LVV), de acuerdo a una plática que sostuve con él en febrero de 2018. Adicionalmente, tengo entendido que las Cátedras recopiladas en el Tercer Testamento corresponden en su gran mayoría a los últimos 3 años de la Comunicación de Espíritu a espíritu, lo que hace poco probable que la comisión recopiladora del LVV se viese inclinada a incluir esta “cátedra” de 1943 proveniente de un lejano y desconocido recinto que, excepto por las inconsistencias que ya han sido señaladas en este hilo, nada tiene de peculiar. Por otro lado, el hecho de que no se identifique el referido recinto en el que la “cátedra” en cuestión fue entregada, no hace más que ahondar las dudas sobre su autenticidad.

c).- Por otra parte, el hecho que la “cátedra” que nos ocupa guarde en apariencia ciertos paralelos (por cierto muy forzados) con la Enseñanza 89 del Libro de la Verdadera, -como lo refiere Cristina-, demostraría más bien que dicha “enseñanza” proviene de un recinto desobediente, pues en esos “templos” es práctica común que los “portavoces” memoricen Cátedras del Tercer Testamento y luego las repitan ante su congregación, obviamente distorsionadas en mayor o menor medida, según la memoria e intención de cada “portavoz”. En el caso que nos ocupa, las inconsistencias que encontramos en esta “cátedra”, evidencian más bien que un “ruiseñor” trató de repetir parte de la Enseñanza 89 del LVV, pero en su intento, y tal vez por los límites de su memoria, adulteró el contenido de la Enseñanza, no solo empleando un lenguaje muy pobre, sino restándole esencia a la Palabra Divina. Suponer lo contrario, es decir, que esta “cátedra inédita” hubiese sido editada para formar la Explicación 89 del Libro de la Vida Verdadera, sería tanto como atribuirle la autoría de dicha Enseñanza al editor, pues más que simples correcciones de estilo, el documento final (enseñanza 89 del LVV) revelaría que el texto de la “cátedra inédita,” fue sustituido en gran parte por las ideas, coneptos y pensamientos propios del editor, a quien en consecuencia, deberíamos atribuirle la verdad, esencia y luz que encierra la Enseñanza, aspectos que, dicho sea de paso, se encuentran ausentes en la supuesta “cátedra inédita”.

Tomemos como ejemplo uno de los párrafos comparados por Cristina en su última participación:

“cátedra inédita”:
23. Dejad destellos luminosos al caminante, sentíd a Dios en la creación, en el alma, que en la más alta consciencia de la vida espiritual encontrará mi Padre su mejor templo y allí morará Jesús, viviendo en las cimas de las mentes, en las cumbres de la consciencia diáfanizada del hombre, que sea más espíritu que carne y más consciencia que sombra.

Enseñanza 89 LVV.
LVV-39. Paso a paso, instante por instante, se va acercando el tiempo destinado para que Yo venga a morar en mi santuario, el que hasta ahora ha permanecido cerrado en el corazón del hombre.

No parece que dichos párrafos guarden mucha semejanza como refiere nuestra hermana Cristina, pero suponiendo, sin conceder, que el primer párrafo correspondiera a una cátedra original, y el segundo párrafo al trabajo del editor, tendríamos que concluir que el editor suplantó al autor, pues lejos de limitarse a simples correcciones de estilo y demás aspectos formales del texto, más bien habría trastocado y sustituido las ideas, palabras y esencia de la “cátedra inédita”, para crear la Enseñanza 89, lo que ciertamente resulta inverosímil.

Debo señalar que, de acuerdo a ciertos documentos originales que en febrero 2018 me mostró Sergio Cerda con motivo de una visita a la Asociación de Estudios Espiritualistas, me di cuenta que la labor de los editores del LVV se concretó a correcciones ortográficas y gramaticales, como la eliminación de pleonasmos y otros errores lingüísticos incurridos por el portavoz. De hecho, me pareció que la labor de nuestros hermanos fue muy discreta. En particular, tuve a la vista el borrador de lo que más adelante sería la Enseñanza 1 del Libro de la Vida Verdadera. Dicho borrador era nada menos que la Cátedra original, con algunas notas manuscritas que, como he señalado, se reducían a corregir errores ortográficos y gramaticales incurridos por el portavoz. Dichas “correcciones” eran muy pocas, -si no escasas-, y no resultaban intrusivas con el texto original.

Nunca observé, por ejemplo, que un párrafo de la Cátedra original fuese mutilado o en su texto sustituido, por las palabras del “editor”. El autor de dichas correcciones firmó como “ingeniero Urrutia”, y el documento contenía la leyenda: “para impresión.” Me parece que nuestros hermanos que tuvieron la responsabilidad de recopilar y editar el LVV, tenían muy presente la gravedad de su misión y no habrían osado traspasar los límites de lo que significa “separar el trigo de la paja”.

Ahora bien, no podemos descartar la posibilidad de que la "cátedra" que aquí se analiza, provenga de algún recinto implantado por el hombre y no por la voluntad Divina, sin embargo, la evidencia apuntaría a que dicha “cátedra” en realidad es de fecha posterior a la publicación del Libro de la Vida Verdadera, y que con el tiempo fue depositada en la Asociación de Estudios Espiritualistas A.C. (de donde supuestamente fue extraída una copia), ya sea con el deliberado propósito de sembrar confusión, o simplemente para que algunos se granjeasen notoriedad por sus “aportaciones” al Espiritualismo Trinitario Mariano, o bien, para que algún recinto y sus integrantes obtuviesen renombre o popularidad, sin reparar en que el día 8 de febrero de 1943 (fecha en que supuestamente fue "entregada"), fue lunes y no domingo….

d).- Por otro lado, he señalado que es muy probable que esta “cátedra” haya sido inspirada por un “falso cristo”, pues a lo largo del documento, se refiere a Nuestro Señor como a :“mi Padre”, es decir, como si se tratase de seres distintos, sin reparar que Padre, Hijo y Espíritu Santo son manifestaciones del mismo Dios.

Cristina refuta dicha afirmación, señalando que “Cristo sí se manifestó en el Tercer Tiempo autonombrándose "Jesús" y que de hecho “en el LVV existen algunos párrafos, en cuales dice Jesús en vez de Cristo;” párrafos que ya han sido muy criticados por varios espiritualistas.

Lo anterior implica un falso debate, pues en realidad no está a discusión el hecho de que en el Tercer Testamento encontremos referencias y aclaraciones en torno a Jesús. Lo que se cuestiona aquí es que el espíritu (encarnado o desencarnado) autor de la supuesta “cátedra” que venimos analizando, siempre se asumió como un ser distinto a Dios, pues se refirió a nuestro Señor en tercera persona, asumiendo que él era Jesús y que venía en este Tiempo en representación del Padre, tal como se advierte en las siguientes expresiones:

4. …. "Es acaso la irradiación de Jesús de Nazaret en este mundo y en este tiempo?" Y hay un si del corazón y un no, del reacio cuerpo, que te aparta de mí y de mi Padre Celestial,”

“19. Ya sabéis quien me envió y a que he venido…

18.- … a todas las almas debo salvar para decir a mi Padre: Padre, lo que me has encargado lo he cumplido…”

“[…], porque soy el Director Espiritual, para llevar las ovejas a mi Padre Celestial."

49. Salud, doy a vosotros la paz y el amor de mi Padre bendito…”

Etc.

Sobre este aspecto abundaré en la siguiente participación,

Bendiciones a mis hermanos
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

Saludos a Todos,

01-004.17 Preparaos, profetas del Tercer Tiempo, para que pongáis alerta a las multitudes y ellas no sean sorprendidas por los falsos cristos y las falsas comunicaciones.

Continuando con el análisis de la “cátedra inédita” compartida por nuestra hermana Cristina, toca revisar si, a la luz del Tercer Testamento, es posible advertir la personalidad de Jesús o Cristo, desligada de la del Padre, como se muestra en la “cátedra” en cuestión.

He afirmado que es muy probable que esta “cátedra” sea obra de un “falso cristo”, es decir, de un espíritu impostor que pretende hacerse pasar por “Jesús de Nazaret,” como si Padre e Hijo fueren seres distintos.

Al respecto Cristina señala:
"Personalmente yo también creo que Jesús se fundió con el Espíritu Divino, osea con Cristo, y por eso no me causa confusión que en el LVV o Tercer Testamento aparezcan estos párrafos con el nombre de Jesús, por lo cuanto no me causa duda alguna leer en cátedras inéditas a Jesús dando cátedra."


A mi tampoco me causa confusión que en el Libro de la Vida Verdadera encontremos a Dios entregándonos Cátedra como Maestro, es decir, como Jesús en el Segundo Tiempo, ese no es el punto a discusión. El debate radica en la identidad del espíritu (encarnado o desencarnado) que, atribuyéndose la personalidad de Jesús o Cristo, se dice emisario de Dios en el Tercer Tiempo, mostrándose sometido a una voluntad superior identificado en tercera persona como: “mi Padre”, cosa que nunca observaremos en las Enseñanzas del Libro de la Vida Verdadera.

En efecto, ya sea que Dios nos hable como Padre, como Maestro o como Espíritu Santo, a lo largo del Tercer Testamento observaremos que siempre lo hace en primera persona, más nunca encontraremos a “Jesús” sometido a una voluntad superior ni hablando del Padre en tercera persona como si fuesen seres distintos.

La siguiente comparativa entre las Enseñanzas del LVV y la “cátedra inédita” que se analiza, nos permitirá apreciar con mayor nitidez este aspecto.
LVV

01-006.37 ¿Por qué tenéis menos temor ahora que os hablo como Espíritu Consolador, que cuando os hablé como Juez en el Primer Tiempo y como Maestro en el Segundo, si soy el mismo Espíritu que os he hablado en los tres tiempos? ¿Acaso porque os hablo con dulzura?

Aquí, el Padre nos reitera que Él mismo es quien nos ha hablado en los Tres Tiempos, como Juez, como Maestro y como Espíritu Consolador, noción contraria a la que nos muestra la “cátedra inédita,” en la que “Jesús” aparece sometido al mandato del “Padre” como si se tratase de un ser superior y distinto a Cristo, tal como se observa a continuación:

“cátedra inédita”

“19. Ya sabéis quien me envió y a que he venido, ya os he dicho antes cuál es mi Divina Tarea de Salvador del Mundo…, y hasta que el mundo no sea espiritualizado, terminarán mis manifestaciones en la tierra…”

Reitero aquí lo dicho en una participación anterior: “En principio, se repite la falacia de que Padre e Hijo son seres distintos, pues comienza diciendo; “Ya sabéis quien me envió,” como si se tratase de un emisario de Dios, para luego atribuirse la tarea (sic) de “salvador del mundo…”

Por otra parte, siendo Cristo el mismo Espíritu del Creador, no tendría por qué hacer alarde de que es un enviado de Dios en este Tiempo para convencernos de que en realidad es “Jesús” como se lee en esta “cátedra”, pues el párrafo en cuestión comienza diciendo “Ya sabéis quien me envió y a que he venido…” como si Cristo estuviese sujeto a otra voluntad suprema. Así es, mientras que en el Tercer Testamento se nos revela que Padre, Hijo y Espíritu Santo son las manifestaciones en las que Dios se ha mostrado ante los hombres, según su evolución, llama la atención que en esta “cátedra” Cristo tenga que invocar la autoridad del “Padre” para ser creído y justificar ante los hombres lo elevado de su misión de “salvador del mundo.”

Al respecto, en el Tercer Testamento encontramos la siguiente advertencia:

05-131.05 … Si alguno os dijera: Soy el enviado de Dios, desconfiad de él, porque, los verdaderos emisarios no hacen alarde, ni pregonan la misión que Yo les confío…

Desde otra perspectiva, debemos considerar que mientras un emisario se ve obligado a identificar y mostrar las credenciales de su soberano para granjearse la credibilidad del receptor o destinatario del mensaje, resulta inconcebible que en el Tercer Tiempo, Cristo aparezca como emisario del Padre, esto es una mentira, pues cuando dice, “Ya sabéis quien me envió y a que he venido…” pasa por alto que Padre e Hijo, son manifestaciones del mismo Dios.

LVV
01-001.69 Si la humanidad de los primeros tiempos, la hubiese encontrado evolucionada espiritualmente, como ésta de ahora, Yo me habría manifestado delante de ella como Padre, como Maestro y como Espíritu Santo.

Este párrafo claramente nos dice que el Espíritu Divino es quien se ha manifestado a lo largo de los Tiempos como Jehová, como Cristo y como Espíritu de Verdad. Contrario a lo que ocurre con la “cátedra” que se analiza, no observamos que la personalidad del Padre aparezca desligada de la del Hijo, como se lee en el siguiente párrafo:

“cátedra inédita”
“18. Soy el Gobernador Espiritual de este Planeta y a todas las almas debo salvar para decir a mi Padre: Padre, lo que me has encargado lo he cumplido.”

Como lo dije en una participación anterior, “el autor de esta “cátedra” se asume como Jesús de Nazaret y reitera la creencia de que Padre e Hijo son seres distintos, pues afirma: “a todas almas debo salvar para decir a mi Padre: Padre, lo que me has encargado lo he cumplido…” si reparar en que el Padre no puede llamar a cuentas al Hijo, por la simple razón de que de Dios es el mismo Espíritu que se ha manifestado como Padre, como Hijo y como Espíritu Santo. Afirmar que el Padre puede llamar a cuentas al Hijo, resulta simplemente absurdo, a no ser que estemos hablando de un “falso cristo.”

Por otra parte, el autor de esta comunicación se asume como “Gobernador Espiritual del Planeta” pasando por alto que el Creador gobierna el Universo entero, y que la manifestación del Tercer Tiempo no estuvo reservada a los habitantes de este planeta, sino a todos los moradores de la Creación.”

Otro ejemplo:

LVV
01-001.68 […] Si me amáis en Jehová, estáis en la verdad. Si me amáis a través de Cristo, Él es el camino, la verdad y la vida. Si me amáis como Espíritu Santo, os acercáis a la Luz. Un solo Dios tenéis, un solo Padre. No son tres personas divinas las que existen en Dios, sino un solo Espíritu Divino, el cual se ha manifestado en tres fases distintas a la humanidad y ésta en su pequeñez, al penetrar en lo profundo, creyó mirar tres personas donde sólo existe un solo Espíritu. Por lo tanto, cuando escuchéis el nombre de Jehová, pensad en Dios como Padre y como Juez. Cuando penséis en Cristo, mirad en Él a Dios como Maestro, como Amor y cuando tratéis de comprender de dónde procede el Espíritu Santo, sabed que no es otro que Dios manifestando su infinita sabiduría a los discípulos que más han adelantado.

Aquí el Padre nos aclara que no son tres personas divinas las que existen en Él, sino un solo Espíritu Divino que se ha manifestado en fases distintas a la humanidad (según su evolución), noción contraria a la que observamos en la aludida “cátedra” en la que Padre e Hijo aparecen como personas distintas, como se muestra a continuación:

“cátedra inédita”
“4. …. "Es acaso la irradiación de Jesús de Nazaret en este mundo y en este tiempo?" Y hay un si del corazón y un no, del reacio cuerpo, que te aparta de mí y de mi Padre Celestial…”

Nótese como cuando en este párrafo se dice: … “del reacio cuerpo que te aparta de mi y de mi Padre Celestial” se reitera la falacia de que Padre e Hijo son seres distintos, pues se afirma que mientras el corazón del hombre acepta la “irradiación de Jesús” en este Tiempo, el cuerpo le aparta de Jesús y de su “Padre Celestial,” (como si los demás humanos no fuésemos hijos del mismo Padre y el corazón no formará parte del “reacio cuerpo”).

LVV
01-006.38 Yo os doctriné en el Segundo Tiempo y hoy vengo a ofreceros el mismo manjar de mi palabra; porque sois mis discípulos y quiero que os alimentéis de Mí.

En este pequeño párrafo podemos encontrar a Dios hablándonos simultáneamente como Padre, como Hijo y como Espíritu Santo, es decir, sin variar su identidad de Todopoderoso, de la misma forma que un humano no varía su identidad cuando pasa de niño a adulto y después a anciano, pues sea cuál sea la etapa de su vida en la que lo encontremos, siempre será el mismo sujeto.

Además, en este párrafo de manera clara, el Padre nos dice que su propio Espíritu fue quien nos adoctrinó en el Segundo Tiempo, por ello, resulta un sinsentido encontrar que en la “cátedra inédita” Jesús o Cristo se presenten como emisarios del Todopoderoso. Por el contrario, nótese en este párrafo como a pesar de que Dios nos habla como Maestro, no por ello su identidad aparece desvinculada de la del Padre ni de la del Espíritu Santo, pues a la par que nos entrega su sabiduría como Espíritu de Verdad, en todo momento encontramos el amor incondicional del Padre.

En conclusión, aunque en el Tercer Testamento es común encontrar a Dios adoctrinándonos como Maestro en este Tercer Tiempo, nunca observamos que la personalidad del Padre aparezca desligada del Hijo, como si se tratase de seres distintos, pues como lo explica el Padre: [“No son tres personas divinas las que existen en Dios, sino un solo Espíritu Divino, el cual se ha manifestado en tres fases distintas a la humanidad" (01-001.68), lo cual contrasta con el contenido de la “cátedra” que se analiza, en la que el “Hijo”, pretende ser un emisario de Dios, es decir, un ser distinto.

04-088.70 ¡Ay de los que habiendo oído mi palabra, la olviden, porque llorarán buscando a su Señor y a su paso sólo encontrarán los falsos cristos, quienes les hablarán en apariencia en la misma forma en que Yo me manifesté, pero con una palabra sin esencia y sin verdad que los llevará a la confusión.


Bendiciones
rafael
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por rafael »

Saludos a todos!

Muy interesantes los comentarios de Cesar y de Cristina.

También debemos considerar algunos pasajes de los Evangelios:

Mateo 10:40 El que os recibe á vosotros, á mí recibe; y el que á mí recibe, recibe al que me envió.

En este pasaje debemos tener cuidado de analiza rl contexto. Si lo vemos sólo literalmente, parece también implicar que Jesucristo no tenía el mismo Espiritu de Dios. Pero sabemos que sí. El contexto es el importante. No está hablando de sí mismo, ni tampoco estahaciendo diferencia entre él mismo (Jesucristo) y Dios Padre. El contexto es relacionado a la doctrina, diciéndonos que quien recibe y acepta la doctrina de los apóstoles, es como si la hubiera recibido de Jesucristo mismo, y entonces, es como si la hubiera recibido de Dios mismo directamente. Este pasaje del evangelio, asi como muchos otros en que se usa una expresión similar a esa, nos habla de algo muy importante, que es la doctrina como proveniente de Dios, enseñanza divina que debe ser considerada como tal.

Por otro lado, hay otro pasaje relacionado con este asunto:

Mat 26:39 Y yéndose un poco más adelante, se postró sobre su rostro, orando, y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí este vaso; empero no como yo quiero, sino como tú.

En este pasaje pareciera también que Jesucristo se diferencía de Dios Padre, pues nos dice pidió en oración al Padre. Pero también aquí debemos considerar el contexto de lo plasmado en el Evangelio. Parte de la explicación del contexto la tenemos allí mismo, en el siguiente versiculo:

Mat 26:40 Y vino á sus discípulos, y los halló durmiendo, y dijo á Pedro: ¿Así no habéis podido velar conmigo una hora?

Yo creo que Jesucristo se muestra ante nosotros como un hermano nuestro, y como tal, sabiendo lo que había de venir, pide al Padre ayuda, pero acepta como primordial el cumplimiento de la voluntad de Dios. Pudiéramos pensar que Jesucristo no necesitaba orar, ni pedir a Dios Padre nada. Pudiéramos también pensar que aunque Jesucristo sí sentía en sí el dolor corporal y sabía de la tortura que iba a recibir de parte de los fariseos, bien pudiera tolerar cualquier dolor, siendo que llevaba en sí el espíritu divino. Pero el contexto nuevamente no era acerca de su persona en lo individual, sino el mensaje que estaba dejándonos a nosotros. Su manifestación como ser humano, hermano nuestro, era para enseñarnos hasta dónde llega el amor de Dios hacia sus hijos, que viene en persona a enseñarnos Su Doctrina, y viene como uno de nosotros, enfatizando así que nosotros somos hijos de Dios, y que hemos recibido de El la vida, el espíritu, y todas las potestades que El nos ha entregado.

¿Qué tan cerca está Dios de nosotros? Tan cerca como estuvo Jesucristo de nosotros, que vivió entre nosotros, creció como hombre entre nosotros, y murió en cuerpo entre nosotros, y por mano de nosotros, traicionado por nosotros. Así de cerca está Dios de nosotros, y así de grande es Su amor hacia nosotros.

Y pues es bueno analizar ... en esa cátedra inédita, deberemos también analizar el contexto de lo que contiene, y si como marca César, tiene varias contradicciones, pues entonces podremos considerarla como contaminada o adulterada.

Sigamos analizando. No he dedicado el tiempo que debiera al análisis de esas cátedras inéditas. Trataré de corregir eso.

CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

Saludos Cristina,
Saludos a Todos los lectores de este foro:

Cristina Escribió:
> Como ya expliqué anteriormente, Cristo sí se manifestó en el Tercer Tiempo varias veces autonombrándose "Jesús". De hecho en el LVV existen algunos párrafos, en cuales dice Jesús en vez de Cristo; estos párrafos ya fueron fueron muy criticados por varios espiritualistas.

Acá te copio algunos párrafos del LVV, que confirman, según mi parecer,que Cristo se autonombró algunas veces Jesús (o fue nombrado así por algunos portavoces) en Su manifestación del Tercer Tiempo entre 1866 y 1950:


Continuando con el análisis de la “cátedra inédita” quiero ocuparme de los supuestos “errores” del Libro de la Vida Verdadera que, como señala Cristina, han sido criticados por “varios espiritualistas”. Pareciera que los supuestos “errores” se hacen consistir en que el Libro de la Vida Verdadera menciona el nombre de Jesús, cuando debería decir Cristo.

No creo que existan tales errores, o por lo menos no todos los que se señalan.

Veamos algunos ejemplos

Cristina escribió:
E. 135,9. Nunca os amedrentéis por el peso de la responsabilidad que he puesto en vosotros; mas pesa el fardo del pecado. Es más doloroso el abismo con sus tinieblas que la luz que existe en la cumbre de la montaña donde mora el Maestro. Nuevamente os digo que el "yugo de Jesús es dulce".
> se refiere al yugo de Jesús del Segundo Tiempo o al yugo espiritual de la vida que nos recomienda Cristo en Su Enseñanza eterna?

Aquí no existe ningún error. El párrafo en cuestión, señala: “Nuevamente os digo que el yugo de Jesús es dulce". Y esto es así porque efectivamente, en el Segundo Tiempo Jesús dijo:

“Porque Mi yugo es fácil y Mi carga ligera." (Mateo 11:30). Como sabemos, la traducción de la Biblia varía de acuerdo a la versión que se consulte. Mientras que en la versión Reina Valera, este pasaje dice: “Mi yugo es dulce…”, en otras versiones de la Biblia encontramos que la traducción reza: “Mi yugo es suave”, aunque como lo revela el Maestro, la traducción más apropiada sería “Mi yugo es dulce;” sin embargo, ya sea que se utilice “fácil”, “dulce” o “suave,” el significado de la Enseñanza sigue siendo el mismo, es decir, que el yugo de Jesús es llevadero.

Eso explica porque en la Enseñanza 135-9 encontramos la frase: “Nuevamente os digo…” pues está reiterando algo que Dios ya antes había dicho cuando se manifestó por medio de Jesús en el Segundo Tiempo.

Cristina escribió:
E. 62,42. Revestíos de mansedumbre, de piedad, de humildad, para que podáis ser reconocidos como mis discípulos. Si os comportáis verdaderamente como discípulos de Jesús, los mismos fariseos, cuando se acerquen a vosotros ocultos bajo un disfraz para sorprenderos, serán los lobos que se conviertan en mansas ovejas ante vuestro ejemplo.
> los discípulos del Tercer Tiempo deberían ser los discípulos de Cristo o del Espíritu Santo, no de Jesús... acá dice que debemos revestirnos con virtudes para ser reconocidos como Sus discípulos.. pero al final dice "discípulos de Jesús"

Tampoco existe error ni contradicción alguna. Aunque los fariseos -cual comunidad judía- dejaron de existir hace ya varios siglos, este párrafo nos exhorta a imitar la paciencia, humildad y amor con el que Jesús muchas veces convirtió a sus detractores, quienes al ver que el Maestro no se alteraba ante las injurias que le proferían, caían avergonzados o arrepentidos de haber ofendido a quien con sus obras solo predicaba la verdad. Por eso el párrafo en cuestión dice: “los mismos fariseos… serán los lobos que se conviertan en mansas ovejas ante vuestro ejemplo” es decir, nos está exhortando a que imitemos los ejemplos de Jesús en el Segundo Tiempo, ya que éstos son imperecederos, al igual que su Doctrina, por lo que en el presente debemos estar alertas ante los nuevos detractores de la Doctrina Espiritualista Trinitaria Mariana, o dicho de otra forma, los fariseos del Tercer Tiempo.

Al respecto el Maestro nos dice: “Hubo ocasiones en las que oculto entre la multitud, había alguno que llevaba la intención de gritar negando mi verdad, asegurando de que Yo era un falso profeta; pero mi palabra le sorprendía antes de que hubiera tenido tiempo de abrir sus labios. Otras veces permití que algún blasfemo me injuriase, para probar ante la multitud que el Maestro no se alteraba ante las ofensas, dándoles así un ejemplo de humildad y de amor.” (1:28:06)

En ese aspecto y en muchos otros, debemos ser discípulos de Jesús, así lo mandata el Tercer Testamento:

LVV.-
“Vuestra misión es la de imitar a Vuestro Divino Maestro en su paso por la Tierra, recordad que cuando Yo me presentaba siempre dejaba un mensaje de paz, sanaba a los enfermos, consolaba a los tristes con el divino poder que posee el amor.”

Pues bien, este párrafo nos conmina a imitar al Divino Maestro en su paso por la Tierra, es decir, a seguir los ejemplos y a comportarnos como discípulos de Jesús.

¿Y que es un discípulo si no aquél que defiende y practica las Enseñanzas de su Maestro? Como podrás notar Cristina, aquí no existe ninguna contradicción.

¿Porque habría de ser un error tratar de ser discípulo de Jesús en este Tercer Tiempo si las lecciones y ejemplos que nos legó son para la eternidad? ¿Acaso el Tercer Testamento viene a negar o desconocer las Enseñanzas que Jesús, (Dios hecho Hombre) nos legó en el Segundo Tiempo?
Evidentemente no.

El Libro de la Vida Verdadera aconseja:

06-151.36 He aquí algunos de los mandatos a los que debe ajustarse todo aquel que en verdad quiera ser cristiano.

06-151.35 Jesús os enseñó la caridad, la mansedumbre, el amor; vino a enseñaros a perdonar de corazón a vuestros enemigos; a deciros que deberíais huir de la mentira y amar la verdad; os manifestó que tanto el mal como el bien que recibieseis lo pagaríais siempre con el bien. El os enseñó el respeto a cada uno de vuestros semejantes, y os reveló la forma de hallar la salud del cuerpo y del espíritu; a honrar con vuestra vida el nombre de vuestros padres, para que a la vez podáis ser honrados por vuestros hijos.

¿Es posible que alguien que se diga discípulo del Espíritu Santo no sea a la vez discípulo de Jesús?

14 Pues bien, hermanos míos, vosotros ya no vivís en el Segundo Tiempo, mas sois discípulos de ese mismo Doctor, de ese mismo Maestro; sois también continuadores de aquellos discípulos, y en vuestras manos espirituales, en vuestro espíritu y en todo vuestro ser, se ha derramado la Divinidad como se derramara en aquellos que siguieran a Jesús en aquel tiempo. (Consejos del Mundo Espiritual de Luz)

“Todas las obras que hice en el Segundo Tiempo para enseñaros mis lecciones de caridad, debéis repetirlas ahora”. LVV

Cristina escribió:
E. 130,1. El mundo se conmueve con el recuerdo de mi pasión. En esta tarde, en que recordáis aquellos sucesos y en que desciende mi rayo divino a dar quietud al espíritu de la humanidad, Jesús os contempla conmovidos.
> Jesús sigue contemplándonos desde el Más Allá?

¿Y por qué no? ¿Acaso Jesús no resucitó y retornó al Espíritu del Padre?

Recordemos la Enseñanza del Señor:

LVV
“Mas las entrañas de la tierra no pudieron guardar aquel cuerpo (el de Jesús) que no les pertenecía, sino al seno del Padre de donde había venido, y a él se volvió.”

“Cumplida en todos aquella misión de amor, el cuerpo de Jesús se fundió con el Espíritu Divino, de la misma manera que tomó forma humana.
“Si el cuerpo de Jesús no brotó de la tierra, ¿Por qué había de rendirle tributo como todos los hombres? El os había dicho: "Mi reino no es de este mundo".

“Ahora os digo: Si al contemplar a Jesús morir sobre la cruz, dudasteis de su Divinidad, podéis decirme: ¿Qué hombre, al tercer día después de muerto, ha salido de su sepulcro sin violarlo y ha ascendido con su propio cuerpo hacia los Cielos? Nadie. Yo lo hice porque soy la vida, porque ni en Espíritu ni en materia podía morir.”

Por otra parte, no podemos perder de vista que este párrafo comienza diciendo: “El mundo se conmueve con el recuerdo de mi pasión.” Y cabe preguntar, ¿Cuál es el recuerdo que tiene la humanidad acerca de la Pasión de Cristo?, ¿Acaso no es la imagen de Jesús pendiente en la cruz? ¿Por qué sería errada entonces la frase “Jesús os contempla conmovidos” si a final de cuentas, aquél Cuerpo que la humanidad recuerda, se fundió y es uno con el Espíritu del Padre?

Tampoco es erróneo que la Enseñanza en cuestión diga: “El mundo se conmueve con el recuerdo de mi pasión…”, pues Dios se hizo hombre en Jesús, encarnó en ese cuerpo y su Espíritu también padeció la ingratitud de sus hijos y la ignominia de la crucifixión.

Concluyo entonces que aquí no existe ningún error.

Cristina escribió:
E. 124,28. Sed humildes ante vuestro Señor y seréis grandes en espíritu, no debilitéis ante las tentaciones del mundo y de la carne; los hombres os dirán, que mientras Jesús os hace postreros y humildes, ellos os harán primeros y grandes en la tierra, mas no les creáis. > creo que aquí se refiere a la Enseñanza del Tercer Tiempo....

Este párrafo solo significa que la Doctrina que Jesús predicó, aún parece impracticable para la humanidad en el Tercer Tiempo, puesto que su cumplimiento requiere humildad, sacrificio y abnegación, algo que no todos estamos siempre dispuestos a dar, ni es algo que se fomente en la sociedad de nuestros días. ¿Por qué los hombres materializados piensan que Jesús nos hace postreros? Repasemos algo sobre las Enseñanzas del Maestro:

“Y al que te hiriere en la mejilla, dale también la otra; y al que te quitare la capa, ni aun el sayo le defiendas.” (Lucas 6:29).

“Pero yo os digo: no resistáis al que es malo; antes bien, a cualquiera que te abofetee en la mejilla derecha, vuélvele también la otra.” (Mateo 5:39)

“Y al que quiera ponerte pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa.” (Mateo 5:40)

“A todo el que te pida, dale, y al que te quite lo que es tuyo, no se lo reclames.” (Lucas 6:30)

¿Acaso ya no está vigente esta Doctrina en el Tercer Tiempo?

LVV "Si alguno te hiere en la mejilla derecha, preséntale también la otra". "Estoy escuchando a los que me dicen: "Maestro, consideramos que es muy dura la prueba de tener que mostrar la mejilla izquierda a aquél que nos hirió la derecha, mas sin embargo, quisiéramos ser vuestros discípulos"... Libro de la Vida Verdadera E30:62,63

“En el Segundo Tiempo, los discípulos de Jesús, le dijeron: "Maestro, dura es Tu palabra, dura es Tu enseñanza", cuando le escuchaban decir que el que recibiere una bofetada en el carrillo derecho, pusiera el izquierdo. Cuán impracticable les pareció esa enseñanza!” Consejos del Mundo Espiritual de Luz.


En ese orden de ideas, si nuestra misión en este Tiempo es la de imitar al Divino Maestro en su paso por la Tierra, queda claro porque nuestro Señor nos aconseja:no debilitéis ante las tentaciones del mundo y de la carne; los hombres os dirán, que mientras Jesús os hace postreros y humildes, ellos os harán primeros y grandes en la tierra, mas no les creáis.


Cristina Escribió:
E.111,7. Aún son niños los hombres; mas la gran prueba que a ellos se acerca, les hará vivir en tan poco tiempo, que de esta infancia pasarán pronto a la madurez, y ya con el fruto de la experiencia clamarán: Tenía razón Jesús, nuestro Padre, vayamos a El.
> completa confusión: quien es verdaderamente nuestro Padre, Cristo o Jesús?


No creo que exista tal confusión. El párrafo en cuestión dice que los hombres aún somos niños, más debido a la gran prueba que se acerca, pasaremos a la madurez y ya con experiencia diremos: “Tenía razón Jesús, nuestro Padre, vayamos a Él.” Esto solo significa que llegará el tiempo en que la humanidad entera, después de grandes tribulaciones, reconocerá que Jesús fue Dios hecho hombre, el mismo Padre morando en este plano entre sus hijos, lo cual llevará al mundo a comprender que la Doctrina y ejemplos de Jesús, en realidad son Obra del Padre mismo, de ahí la exclamación: “Jesús, nuestro Padre, vayamos a Él.” ¿O acaso la Doctrina y ejemplos de Jesús no son obras de nuestro Padre?

Y es que la humanidad de nuestros tiempos, aún no reconoce unánimemente que Jesús fue el mismo Dios hecho Hombre, de ahí su infancia espiritual.

LVV.- “Hoy ya no dudan de Jesús, pero muchos discuten y aún niegan mi Divinidad. Unos me atribuyen gran elevación espiritual: otros, afirman que Yo también voy caminando por la senda de la evolución del espíritu para poder llegar al Padre; más si así fuese, no hubiera venido a deciros: “Yo soy el camino, la verdad y la vida.”

Recordemos que cuando Dios habló a través de Jesús, dijo: “Quien conoce al Hijo, conoce al Padre, porque Él está en Mí y Yo estoy en Él.”

Veamos:
1-75 “Basta conocer algo de la palabra que Jesús enseñó a la Humanidad, para que comprendáis que un solo Dios ha existido y será uno solo por siempre. Por eso os dije a través de Él: -Quien conoce al Hijo conoce al Padre, porque Él está en Mí y Yo estoy en Él”

Esto es, la encarnación del Verbo fue una muestra de amor que el Padre le dio a sus hijos, para que lo sintiésemos más cerca de nosotros. Entonces, si Jesús fue el cuerpo en el que el Padre encarnó y se hizo hombre, y ese cuerpo retornó al Espíritu Divino y es uno con el Padre, notarás que no existe ninguna contradicción en la expresión “Tenía razón Jesús, nuestro Padre, vayamos a Él.”

06-170.09 ¡Ah mis hijos amados! si pudieseis llegar a comprender que la encarnación del Verbo sobre la Tierra es la más grande expresión del amor divino; fue un anhelo de humildad ante vosotros y una lección en mi deseo de limitarme, de hacerme pequeño, para que me sintieseis más vuestro y vosotros más cerca del Padre.

Esto reitera lo antes dicho: Dios encarnó en Jesús para que sus hijos sintiésemos al Padre más cerca de nosotros, lo que significa que los ejemplos y Doctrina de Jesús, son obra de nuestro Padre

Cristina escribió:
E. 58,65. A veces os contemplo así, débiles en la fé. Basta muchas veces que el pan sea escaso en vuestra mesa o que las puertas del trabajo por momentos se cierren, para que la duda se apodere de vosotros, olvidando que váis en la barca con Jesús, quien os dice también: ¡Ah hombres de poca fe!
> la barca del Tercer Tiempo sería la de la fé en la revelación del Espíritu Santo. En el Tercer Tiempo tenemos poca fé en la Palabra de Cristo... acá pero dice la barca de Jesús...

Evidentemente este párrafo únicamente está remembrando una de las Enseñanzas que Jesús nos legó en el Segundo Tiempo, misma que podemos aplicar a nuestra vida actual, pues esa Enseñanza nos dice que no debemos perder la fe en la adversidad, pues Dios está con nosotros.

¿Acaso las lecciones de Jesús no encierran una Enseñanza espiritual para todos los tiempos?

Cuantas veces nuestra vida se parece a esa barca zarandeada por las olas a causa del viento contrario. La barca zarandeada puede ser nuestra vida afligida por la enfermedad, el desempleo, la escases, etc… El viento contrario puede ser la incomprensión y hostilidad de las personas, la dificultad para encontrar casa o trabajo, etc. Al igual que en Segundo Tiempo, debemos estar consientes de Dios es el Único capaz de tranquilizar el viento y las olas de nuestra vida, por lo que debemos permanecer serenos, es decir, conservar la fe, sin duda, una Enseñanza espiritual para todos los tiempos.

Cristina escribió:
E.58,13. Discípulos, estoy en vuestro corazón, para eso murió Jesús entre vosotros, para vivir por siempre en vuestro corazón. > Acá puede ser un fallo del portavoz, porque según nuestra comprensión es Cristo quien vive en nuestro corazón.


Todo lo contrario, si nuestros más grandes afectos “viven en nuestro corazón”, ¿porqué Jesús no podría ocupar un lugar en el corazón de la humanidad si fue el ejemplo vivo y perfecto de que sí se puede derrotar al mundo y a la materia, que puede triunfar el espíritu sobre la fragilidad de la carne y preparó al espíritu de la humanidad para este Tercer Tiempo?

Es evidente que muchas de las criticas al Tercer Testamento, así como muchos de los errores que “varios espiritualistas” le atribuyen a esta Obra, carecen de sustento.

Bendiciones
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

Saludos a Todos:

En definitiva, algo no cuadra con la explicación 50 del “Mundo Espiritual de Luz,” empezando porque existen 2 versiones de la misma, cuyo común denominador es la aceptación de una serie de mitos y creencias que se encuentran desvirtuados en el Libro de la Vida Verdadera, como por ejemplo los mitos del “ángel caído,” “el pecado original” y el “paraíso perdido”, pero sin duda, lo que más llama la atención de dicha explicación, es la falacia sobre existencia de las “almas” de los reinos mineral, vegetal y animal (entiéndase criaturas sui generis de las que se dice son capaces de evolucionar, autodeterminarse y mutar de “reino”, es decir, gozan de voluntad y libre albedrio, y además piensan, sienten y actúan, pero nadie puede verlas o palparlas porque son de materia “sutil”, y ahí no para la cosa, en dicha explicación también se afirma que las “almas” reencarnan), lo cual choca con las Enseñanzas del Libro de la Vida Verdadera, en las que se nos explica que, después de Dios, solamente los espíritus gozan de los dones de voluntad y libre albedrío, y que el Padre, como muestra de amor hacia sus hijos espirituales, instituyó la ley de reencarnación para su perfeccionamiento y evolución. Si al leer estas líneas, se pregunta usted cómo es posible que exista tal contradicción en esta Doctrina, quiero que sepa que no hay tal. Simplemente la explicación 50 es falsa. Los defensores a ultranza de esta “explicación” se han quedado cortos en sus respuestas, como podrá notarlo en este hilo y algunos otros, algunos han recurrido a interpretaciones esotéricas de la Biblia que ni ellos mismos parecen comprender, (aumentando su confusión y confundiendo a otros), algunos ya simplemente eluden hablar del tema en público (enhorabuena), otros más, han optado por cruzarse de brazos y esperar a que algún día “aparezca el manuscrito original”, confiados en que ese acontecimiento llegará y por fin encontrarán la “verdad oculta” de esta explicación.

Bueno, por ahora quisiera comentar con ustedes algunos otros párrafos de la susodicha explicación 50 que colisionan con las Enseñanzas del Libro de la Vida Verdadera. Me refiero a los párrafos 28 y 29, que en lo conducente dicen:

“28. Recordad cómo en Génesis se os relata que la advertencia de no tomar fruto prohibido estaba dada a Adán y Eva, y el fruto prohibido es símbolo de la ciencia que el hombre nunca debió haber probado…

29. Y así sucedió, hermanos: la serpiente, la tentación, os presentó ese fruto lleno de veneno, lleno de bajezas, y al probarle, el hombre perdió el paraíso que le había entregado el Padre para recreo y evolución.”

En el primer párrafo encontramos que el “fruto prohibido” tiene un significado simbólico, ya que representa la “ciencia que el hombre nunca debió probar.”

Nuevamente hay algo que no cuadra en esta explicación, pues si Dios es el principio y fin de todas las ciencias, ¿por qué habría de prohibirle a sus hijos descubrir a su Señor a través del camino de la ciencia y el conocimiento de la Naturaleza material?

Cuidado, la interpretación que nos presenta la explicación 50 es la misma que siglos atrás dio origen a la época del oscurantismo, caracterizada por una lucha entre ciencia y religión, en la que los cargos de herejía, tortura y juicios sumarios se cernían sobre todo aquél que osara contradecir el dogma católico a través de sus descubrimientos científicos.

En su Palabra del Tercer Tiempo, el Padre nos aclara:

E 79:39. No vengo a poner en pugna la espiritualidad con la ciencia, porque ese error ha sido de los hombres más nunca mío;

El Tercer Testamento nos descubre el significado justo de la parábola del Paraíso, no sin antes remembrar las erróneas interpretaciones que sobre ella ha hecho la humanidad:

06-161.07 La hermosa parábola del paraíso, del árbol de la ciencia del bien y del mal, fue dada por inspiración a los primeros. Fue un bello mensaje para los hombres de todos los tiempos y de todas las edades; pero la verdadera esencia de aquella enseñanza, no fue entendida por unos y fue falseada por otros.

06-161.08 De esta incomprensión nació una pugna que dividió a los que han estudiado las revelaciones divinas, y a los que han hurgado en la Naturaleza y así fue cómo surgió la lucha entre los que me buscan con el espíritu y los que todo lo esperan en forma material.

06-161.09 Qué necios fueron los que sostuvieron que la ciencia era abominable ante los ojos de Dios, Yo nunca me he declarado enemigo de ella, ya que Yo soy el principio y el fin de todas las ciencias. Los que con su ciencia llegaron a formar su ley, fueron los materialistas; por rendirle culto a su ciencia olvidaron a Dios. Aquél que con su sabiduría divina lo ha hecho todo.

El verdadero significado de la parábola del Paraíso:

LVV.- "La hermosa parábola del paraíso, del árbol de la ciencia del bien y del mal, fue dada por inspiración a los primeros. Fue un bello mensaje para los hombres de todos los tiempos y de todas las edades; pero la verdadera esencia de aquella enseñanza, no fue entendida por unos y fue falseada por otros. Cuando se os habló del árbol de la vida, de la ciencia del Bien y del Mal, del cual comió el hombre, sólo se os quiso dar a entender que, cuando el hombre llegó a tener conocimiento suficiente para distinguir entre lo justo y lo injusto y comenzó a ser responsable de sus actos, desde entonces comenzó a recoger el fruto de sus obras.”

“La vida de los primeros seres quedó envuelta en aquella parábola que os revela cómo perdió el hombre el paraíso de la inocencia en que vivía y cómo renunció a una vida de contemplación y de paz, por un mundo de lucha, de trabajo, de evolución y méritos: Todo ello estaba dentro de lo que debía ser, dentro de los designios del Creador. Aquella renunciación era necesaria para que despertase el espíritu ante la voz de su conciencia que es luz divina en el interior del hombre y éste comenzara su camino haciendo méritos, ascendiendo desde el plano más bajo hasta el más alto, destinado al espíritu por el Creador.”

06-161.10 ¿Cuál fue el verdadero sentido de aquella parábola que entregué a los primeros? Su sentido se lo enseñó la voz divina que por vez primera se hacía sentir en el hombre a través de su conciencia, para prevenirlo ante las pruebas que la vida le presentaría. Era la voz paternal que le decía con todo cariño al hijo: "Preparaos, velad y orad para que no caigáis en tentación. Alerta, despertad vuestros sentidos y potencias para que podáis salir avante de la prueba que os dejo dentro de la lucha del espíritu y la materia, en la que deben triunfar los valores eternos sobre la pequeñez del cuerpo perecedero. Mirad todo cuanto os rodea, pero caminad con cautela para que no vayáis a tropezar. Ese cuerpo que poseéis y a través del cual percibís todas estas maravillas y bellezas de la Creación, es una débil criatura a la cual debéis guiar con el espíritu, no vayáis a dejar que ella os imponga sus deseos y sus inclinaciones materiales, enseñadla a que ella tome lo que necesite siguiendo mi Ley.

06-161.11 ¿Quién podrá aconsejaros en cada uno de vuestros pasos? La conciencia, esa luz divina que dejo en vosotros para que sea vuestro faro y vuestra guía en la jornada. Y ¿Cómo podréis ser sensibles a esa voz y a ese llamado? Por medio de la oración, que es la forma de comunicaros con el Padre. Si así os preparáis, vuestra existencia en la Tierra será un perpetuo Edén".


Ahora bien, en el párrafo 29 de la explicación 50 se dice que: “la serpiente, la tentación, os presentó ese fruto lleno de veneno, lleno de bajezas, y al probarle, el hombre perdió el paraíso que le había entregado el Padre para recreo y evolución.”

Evidentemente la afirmación de que “el hombre perdió el paraíso que Dios le había entregado para recreo y evolución” únicamente tiene sentido si se le considera como un paraíso material o terrenal, cosa que acontece en la referida explicación, pues recordemos que en dicho escrito también se dice: “… y todo cuanto el Padre puso en este paraíso, lo habéis perdido por haberle dado aposento a la tentación y a la desobediencia” y más adelante sentencia: 47. Estudiad y analizad, hermanos, para que comprendáis mejor las razones de vuestra presencia en este plano, en este mundo, que ha sido vuestro paraíso perdido, mismo que lograréis recobrar merced a la revelación del Espíritu Santo.”

Esto es una falacia:

Cual es verdadero significado del paraíso que habitaron los primeros hombres:

El Tercer Testamento nos brinda una explicación amplia y clara al respecto:

83 El Paraíso no está en la Tierra ni desapareció con el pecado del hombre. El paraíso del Padre es eterno y a él llegarán las nuevas generaciones.

84 Cuando mi Reino penetre en todos los corazones y su influencia divina invada los caminos y las sendas todas de los hombres, volverá esta Humanidad a sentir la beatitud, la paz que los primeros moradores de esta Tierra experimentaron en sí mismos y dirán los hombres de aquellos tiempos: -¡El Paraíso vuelve! ¡El Paraíso se acerca nuevamente a nosotros!

85 Ese paraíso no es otra cosa que el Reino de los Reinos; el paraíso que habitaron vuestros primeros padres no estaba fuera de ellos, estaba dentro de ellos mismos. En su espíritu llevaron el paraíso que no era otra cosa que la paz de mi Espíritu, la paz de mi Reino, porque antes de que ellos despertaran para el mundo, siendo espíritus encarnados, hacían obras con cierta pureza.

86 Pero el Padre os pregunta: ¿Creéis vosotros que el Padre estuviera satisfecho con esa pureza de aquellas primeras criaturas, pureza que provenía de su inocencia y de su falta de saber? No, pueblo amado. Por medio de aquella inocencia el Padre no podía ser conocido por Sus hijos, no podía ser comprendido ni amado, no podía ser valorado ninguno de Sus atributos divinos.

87 No podía el Padre llenarse de gloriosa satisfacción si no contemplaba méritos en sus propios hijos y es por eso que el Creador dispuso que la carne revelara al hombre los secretos de la vida humana, pero al mismo tiempo permitió que el espíritu le revelase a la carne, por medio de la intuición, la existencia del Padre Creador.

Y ante la debilidad de la carne estaba la fortaleza del espíritu, presidida siempre por la luz de la conciencia, en la cual está mi ojo, está mi balanza, está mi voz.

88 En el instante en que el espíritu despertó para la vida humana, antepuso el llamado de la carne a la voz de la conciencia y a la revelación de ella, y el hombre renunció así a llevar una vida espiritualizada; en esa circunstancia comenzó el crisol, la lucha, las necesidades, el dolor, como las consecuencias o el resultado de todos los pensamientos, de todas las palabras y de todas las acciones.

89 Así entonces comenzó el desarrollo del espíritu a través del dolor y de las facultades humanas también, y aquella paz, aquel bienestar incomprensible, aquella beatitud que el espíritu experimentara en medio de su inocencia, fue desapareciendo a medida que la lucha, las necesidades, el trabajo y el arduo desarrollo del espíritu y la carne fueron siendo en el hombre.

Y el hombre se sorprendió de no encontrar ya aquella tierra de bendiciones, que bien conocía y a la que después no podía hallar.

90 ¿Dónde había quedado aquel jardín ameno, aquel edén que era el paraíso de las delicias, de la bienandanza, del bienestar y la inocencia? Se había elevado el Padre y había quedado solamente un átomo de paz, una chispa de luz y una conciencia para alumbrar la senda del hombre a través de su larga jornada.

91 Por eso en vano buscan los hombres aquel jardín; en vano los hombres han cruzado por distintos lugares en busca del paraíso y no lo han encontrado, porque el Paraíso nunca ha estado en esta Tierra, ha estado en el espíritu, en el corazón de los hombres.

92 Pero hoy os digo: El paraíso que poseyeron vuestros primeros padres por virtud de la inocencia, vosotros lo recobraréis por virtud de los méritos y de la conciencia.

93 Ya sabéis, discípulos del Señor, lo que es aquel paraíso que para unos ha sido solamente una figura o una parábola, para otros una leyenda y para muchos, algo sin valor.

94 El Paraíso existió, existe y persistirá en la eternidad. Y en todos los tiempos ese paraíso, que es el Reino del Padre, se ha acercado a los corazones que le buscan, a los espíritus que se elevan en pos de ese Reino, a los espíritus que abren sus puertas para recibir la influencia, el ambiente, la beatitud de aquel Reino.
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

Estimados Todos,

Antes que nada, les deseo un feliz año nuevo a todos. Espero que la comunicación que mantenemos por este medio, de alguna forma sirva para unificar nuestros criterios y avanzar en el conocimiento de la Doctrina Espiritualista Trinitaria Mariana.

Con el fin de demostrar la falsedad de la Explicación 50 del “Mundo Espiritual de Luz”, y en base a ello solicitar su retiro del Libro “Explicaciones del Mundo Espiritual de Luz”, a continuación me permito mostrarles, a manera de resumen, algunos extractos del Libro de la Vida Verdadera con Enseñanzas referentes a la creación de los espíritus, el hombre y el universo material, así como las motivaciones que Dios, nuestro Señor tuvo para ello. Esperamos que con este ejercicio, el lector pueda notar las contradicciones y mentiras que, en relación a esta temática, se encuentran en la susodicha explicación 50.


( 05-129.05) […] Comprended que he tenido necesidad de manifestarme poco a poco delante de vuestro espíritu, para que podáis llegar a mirarme en todo mi esplendor. Si al principio de vuestra evolución espiritual me hubiese mostrado a vuestro espíritu en toda mi grandeza, ¿qué habríais visto, sentido o comprendido? Nada; al sentiros cerca de Mí, hubieseis percibido un vacío infinito, o al querer concebir la profunda verdad, hubieseis encontrado impotente a vuestra razón y débil a vuestro espíritu. Hoy vengo a descorrer otro poco el velo de mi arcano, para que conozcáis algo más de vuestro Dios.

05-115.03 Os he dicho que esta tierra no es vuestra verdadera patria, porque en verdad, hubo un tiempo en que tuviste por morada la gloria y estabais con el Padre Celestial. Cuando no habíais descendido aún a este planeta, estabais en la mansión espiritual en donde todo es luz y verdad, pero esta impresión no la grabasteis en vuestro espíritu y por eso la memoria os traiciona y no recordáis nada de aquella vida, de vuestra estancia en lo que llamáis cielo, que no es igual a lo que vosotros imagináis a través de vuestros sentidos en este mundo que llamáis tierra.

02-035.48 Escuchad discípulos: Antes de que surgierais a la vida, Yo ya existía y en mi Espíritu estaba latente el vuestro. Mas no quise que heredaseis mi Reino sin haber hecho méritos; no quise que poseyeseis lo existente sin saber quién os había creado, ni quise que os marchaseis sin rumbo, sin destino y sin ideal.

05-114.36 Podéis dudar de todo lo que os digo, mas en verdad aquel valle fue vuestra morada cuando erais espíritu. Fuisteis moradores de aquella mansión en la cual no conocisteis el dolor, en la que sentíais la gloria del Padre en vuestro ser, porque no había mancha en él; mas no teníais méritos, era menester que dejarais aquel cielo y descendierais al mundo para que vuestro espíritu, mediante su esfuerzo, conquistara aquel reino;

274-53 En verdad os digo, que antes que los mundos fuesen hechos y antes de que el hombre apareciese en la Tierra, ya existía vuestro espíritu. Fueron para él épocas de inocencia, toda una vida en aquellas mansiones de preparación, tiempos en que el espíritu fue instruido para habitar la Tierra, encarnándose en el hombre.

02-035.49 Por eso os di la conciencia, para que os sirviese de guía; os concedí el libre albedrío para que vuestras obras tuvieran verdadero valor ante Mí. Os di espíritu, para que él anhelara siempre elevarse hacia lo luminoso y puro. Os di el cuerpo para que por medio del corazón tuvieseis sensibilidad para lo bueno y para lo bello, y para que os sirviese de crisol, de prueba constante y también de instrumento para habitar en el mundo material. La Tierra ha sido escuela para vuestro espíritu, en ella nunca ha faltado la presencia del Divino Maestro; la vida humana ha sido libro de profunda sabiduría para el espíritu encarnado.

11. Me preguntáis: “¿Por qué es tan largo el camino y tan lleno de pruebas el sendero del espíritu?” Porque es muy grande la dicha que tendrá que disfrutar en el Reino perfecto que le aguarda y que debe alcanzar con sus méritos.

Por eso os digo que la vida del espíritu desde su partida del seno divino hasta su retorno, es una escala de evolución.

233-26 Yo hice este mundo para que sirviese de morada pasajera a espíritus encarnados, pero antes de que ellos viniesen a poblarlo, los preparé con los dones del entendimiento y de la voluntad, con mi luz en su Conciencia. Yo, de antemano sabía el destino y la evolución de mis criaturas, deposité en la Tierra, en sus entrañas, en su superficie y en su atmósfera, todos los elementos necesarios para la conservación, el sustento, el desarrollo y aun el recreo del ser humano. Mas para que el hombre pudiera descubrir los secretos de la Naturaleza cual fuente de vida, Yo permití que su inteligencia despertara.

7. Me preguntáis: “¿Por qué no os revelé todo desde un principio para evitaros tropiezos, errores y caídas?” Y os digo: No podríais haber comprendido mis revelaciones estando carentes de evolución y de desarrollo espiritual. Entonces os era suficiente el conocimiento de mi Ley, como el camino recto que había de llevaros hasta la fuente de inagotable sabiduría y eterna revelación. Mi sabiduría he venido enseñándola a lo largo del tiempo de las Eras, ya que siendo tan grande, no podríais conocerla en un instante.

12. Los primeros hombres, aquellos que fueron padres de la humanidad, conservaron por un tiempo la impresión que su espíritu trajo del Valle espiritual, impresión de beatitud, de paz y delicia que estuvo en ellos mientras no surgieron en su vida las pasiones de la materia y también la luc
ha por subsistir.

13. La mente materializada de los hombres, confundiendo el verdadero sentido de aquel testimonio, llegó a creer que el paraíso en que vivieron los primeros hombres, fue un paraíso terrenal, sin comprender que fue un estado espiritual de aquellas criaturas.

El paraíso que habitaron vuestros primeros padres no estaba fuera de ellos, estaba dentro de ellos mismos. En su espíritu llevaron el paraíso que no era otra cosa que la paz de mi Espíritu, la paz de mi Reino, porque antes de que ellos despertaran para el mundo, siendo espíritus encarnados, hacían obras con cierta pureza.

Pero el Padre os pregunta: ¿Creéis vosotros que el Padre estuviera satisfecho con esa pureza de aquellas primeras criaturas, pureza que provenía de su inocencia y de su falta de saber? No, pueblo amado. Por medio de aquella inocencia el Padre no podía ser conocido por Sus hijos, no podía ser comprendido ni amado, no podía ser valorado ninguno de Sus atributos divinos. No podía el Padre llenarse de gloriosa satisfacción si no contemplaba méritos en sus propios hijos y es por eso que el Creador dispuso que la carne revelara al hombre los secretos de la vida humana, pero al mismo tiempo permitió que el espíritu le revelase a la carne, por medio de la intuición, la existencia del Padre Creador.

La hermosa parábola del paraíso, del árbol de la ciencia del bien y del mal, fue dada por inspiración a los primeros. Fue un bello mensaje para los hombres de todos los tiempos y de todas las edades; pero la verdadera esencia de aquella enseñanza, no fue entendida por unos y fue falseada por otros.

En el hombre hay dos fuerzas que siempre han estado en lucha: su naturaleza humana y su condición espiritual que es eterna. Desde el principio de los tiempos existieron dos caminos para que el espíritu decidiera tomar uno de ellos: el del bien y la virtud o el del mal. En esa lucha el espíritu alcanzaría conocimiento, experiencia y méritos.

Cuando se os habló del árbol de la vida, de la ciencia del Bien y del Mal, del cual comió el hombre, sólo se os quiso dar a entender que, cuando el hombre llegó a tener conocimiento suficiente para distinguir entre lo justo y lo injusto y comenzó a ser responsable de sus actos, desde entonces comenzó a recoger el fruto de sus obras.”

“La vida de los primeros seres quedó envuelta en aquella parábola que os revela cómo perdió el hombre el paraíso de la inocencia en que vivía y cómo renunció a una vida de contemplación y de paz, por un mundo de lucha, de trabajo, de evolución y méritos: Todo ello estaba dentro de lo que debía ser, dentro de los designios del Creador. Aquella renunciación era necesaria para que despertase el espíritu ante la voz de su conciencia que es luz divina en el interior del hombre y éste comenzara su camino haciendo méritos, ascendiendo desde el plano más bajo hasta el más alto, destinado al espíritu por el Creador.”

Este camino espiritual del que os hablo ahora, es el que di a conocer a Jacob en lejanos días, al revelarle la Escala de Perfección. Ahí está esa Escala delante de todo espíritu, como un camino que os invita a la ascensión. Su base es este Valle humano, más abajo hay abismos, pero esos no los he creado Yo. Hacia arriba están los peldaños en número infinito, como una cuesta que conduce a la cumbre de la espiritualidad. 5-126-12

02-035.38 El Padre al formaros os puso en el primer peldaño de esa escala, con el fin de que recorriendo ese camino, tuvieseis ocasión de conocer y comprender verdaderamente a vuestro Creador. Pero ¡cuán pocos iniciaron la jornada ascendente partiendo del primer escalón! Los más se unieron en su desobediencia, en su rebeldía, haciendo mal uso del don de la libertad y desoyendo los dictados de la conciencia, dejándose dominar por la materia, para crear con sus vibraciones una fuerza, la del mal, y cavar un abismo hacia donde su influencia tuvo que arrastrar a sus hermanos, que entablaron una lucha cruenta entre sus flaquezas y perversidades, y su anhelo de elevación y de pureza. Así entonces comenzó el desarrollo del espíritu a través del dolor y de las facultades humanas también, y aquella paz, aquel bienestar incomprensible, aquella beatitud que el espíritu experimentara en medio de su inocencia, fue desapareciendo a medida que la lucha, las necesidades, el trabajo y el arduo desarrollo del espíritu y la carne fueron siendo en el hombre.


2-40-81 Sabed que el mal surgió del hombre, de sus flaquezas, y que a medida que fue creciendo en número la humanidad, así como sus imperfecciones y pecados, la fuerza o influencia del mal fue aumentando.

05-114.57 El pecado ha nacido en el mundo; los espíritus al brotar de Dios, unos permanecieron en el bien, mientras que otros al desviarse de ese camino, crearon uno distinto, el del mal.


En el instante en que el espíritu despertó para la vida humana, antepuso el llamado de la carne a la voz de la conciencia y a la revelación de ella, y el hombre renunció así a llevar una vida espiritualizada; en esa circunstancia comenzó el crisol, la lucha, las necesidades, el dolor, como las consecuencias o el resultado de todos los pensamientos, de todas las palabras y de todas las acciones. Esa fuerza, formada por pensamientos, ideas, sentimientos y pasiones, comenzó a hacer sentir su influencia en los hombres y éstos llegaron a creer que se trataba de un espíritu que seguramente era la representación del mal, sin darse cuenta de que esa fuerza está formada por sus imperfecciones.

11-328-19 Entre vosotros están los discípulos que a sí mismos se preguntan: “¿Por qué si nuestro espíritu brotó de un Padre todo amor, toda pureza y perfección, no ha podido mantenerse ni perseverar en el bien y en la virtud?” Y os contesto: Yo envié a vuestro espíritu a la Tierra, dotado de todos los atributos que hay en mi Espíritu, y lo formé como hijo semejante a su Creador; le fue confiada una materia para su tránsito sobre la Tierra y esa materia fue el principio de pruebas y de lucha para el espíritu, porque la carne es débil; así tenía que ser, frágil, para probar la fortaleza del espíritu.

42. El amor al mundo, la codicia por lo terreno, el deseo de la carne, el deleite de todos los bajos deseos, el egoísmo, el amor por sí mismo y el orgullo, fueron la fuerza con que creasteis una vida según vuestra inteligencia y vuestra voluntad humana, cuyos frutos os he dejado recoger para que vuestra experiencia llegue a ser absoluta.

Os he hablado de las fuerzas del mal y ¿acaso he hecho mención de algún espíritu que las represente? ¿Lo he nombrado por ventura? -No, me decís. Mas, debo aclararos, que no existe espíritu alguno que sea el origen del mal. Las antiguas creencias, formas y nombres simbólicos con que los hombres representaron el mal, dándole forma humana y concediéndole existencia espiritual, deben desaparecer, porque sin daros cuenta habéis creado con ellos mitos y cultos supersticiosos, indignos de la evolución espiritual que el hombre debe alcanzar en este tiempo. Ya empezáis a reconocer que ese ser a quien llamáis demonio, no es sino la flaqueza de vuestra carne, la sed de deleites insanos de la materia, el orgullo, la vanidad y todo aquello que mueve a la maldad. Yo no he venido a infundiros temor, sino a inspiraros amor. Os he enseñado que no os castigo, sólo dejo que recojáis los frutos de vuestra siembra; si son dulces, serán vuestra felicidad y salvación, si son amargos, os despertarán al arrepentimiento y al deseo de perfeccionaros.

92 Pero hoy os digo: El paraíso que poseyeron vuestros primeros padres por virtud de la inocencia, vosotros lo recobraréis por virtud de los méritos y de la conciencia.

25. Estáis sujetos a la Ley de evolución, he aquí el por qué de vuestras reencarnaciones. Sólo mi Espíritu no necesita evolucionar: Soy inmutable.

El espíritu recibe de la materia las impresiones que ésta recoge en la vida; cuando mayor llegue a ser su sensibilidad y preparación, mayor será la cosecha para el espíritu. El cuerpo es sólo el instrumento, el intérprete, el báculo y el crisol. 6-151-60

26. Desde el principio os he mostrado la escala por donde tienen que ascender los espíritus para llegar a Mí. Hoy no sabéis en qué plano os encontráis, más cuando dejéis vuestra envoltura conoceréis vuestro grado de evolución. No os detengáis, porque seríais un obstáculo para los que vienen detrás de vosotros

Se levantará mi pueblo dando la Buena Nueva y propagando mi Mensaje de este tiempo. Daréis pruebas de mi verdad, no sólo con vuestras palabras, sino ajustando vuestra vida al cumplimiento de esta Doctrina, en todas vuestras obras. Afirmaréis que la reencarnación del espíritu, es una de las grandes verdades que la humanidad debe conocer y creer. Hay quienes por intuición presienten, aceptan y creen en ello, como algo que no podía faltar en mi amorosa justicia hacia los hombres, mas también habrá muchos que os llamen blasfemos y mentirosos; no temáis, lo mismo les sucedió a mis apóstoles cuando predicaban la resurrección de los muertos enseñada por Jesús, los sacerdotes y los magistrados los pusieron en la cárcel por predicar tales enseñanzas. Más tarde, el mundo aceptó aquella revelación, aun cuando os lo puedo asegurar que no llegó a comprender toda la importancia de esa enseñanza, siendo menester que viniese Yo en este tiempo a enseñaros que la resurrección de la carne sólo puede referirse a la reencarnación del espíritu, ya que éste es el principio y la razón de la vida, de que en verdad es eterno. 6-151-56

No sabéis cuantas etapas tendréis que vivir aún en este planeta. Si encuentro justo que volváis a encarnaros, tendréis que venir en nueva materia, pero trayendo mayor evolución en el espíritu, el cual no se rebelará a la voluntad divina, y continuaréis vuestra labor en bien de vuestros hermanos: Seguiréis elevándoos y perfeccionándoos, plenos de confianza y esperanza en mi justicia. 6-156-7

-122.38 Mas debo deciros que aunque la vida, en este mundo llegue a alcanzar las alturas de la virtud y de la justicia, no será aquí en donde lleguéis a encontrar vuestra morada perfecta. Vuestro paso Por este valle es pasajero, sólo os servirá de crisol, de escuela, de libro para alcanzar la elevación de vuestro espíritu.

05-138.09 Es necesario que comprendáis que he venido a enseñaros todo lo que debéis saber, para que podáis penetrar en los mundos o moradas que os esperan; porque así como vuestro espíritu tuvo que ser preparado en el valle inmediato en que moraba, para poder encarnar y habitar en la tierra, así habrá de prepararse para retornar al valle que dejó, aunque va a moradas más elevadas en amor, en pureza y en sabiduría.


Saludos
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

Saludos Lector:

Continuando con el análisis sobre la falsedad de la explicación 50, vale la pena referirnos a un mito en torno a un supuesto error que se le atribuye a la comisión recopiladora de las Enseñanzas que conforman el Libro de la Vida Verdadera. Se dice que existen cátedras originales que explican ampliamente lo que es el “alma”, pero que por “falta compresión”, los editores removieron dicha palabra, con lo cual adulteraron la esencia del Tercer Testamento, pero ¿realmente existe evidencia de ello? Hasta ahora ninguna. La realidad es que del análisis a las Cátedras originales con las que se formó el LVV, se advierte que la palabra “alma” siempre fue utilizada como sinónimo de “espíritu” o “persona”, al ser las acepciones más comunes que dicho vocablo tiene en nuestro país:

Al respecto, Alfredo escribió.

Alfredo escribió: Lun Feb 13, 2017 4:33 pm Saludos a todos.

En los tiempos en que las cátedras eran entregadas hasta 1950, algunos recintos compartían cátedras ya depuradas, las cuales eran mimeografiadas (reproducidas en mimeógrafos) en papel tamaño oficio; de esas cátedras varios recintos tienen copias aunque quizás no todas.

De una colección de ellas, al parecer completa, fueron publicados varios tomos bajo el nombre de “Cátedras del Divino Maestro dadas antes de 1948”

De esas cátedras se tomaron también para incluirlas en el LVV luego de haberles dado una segunda revisión, en la cual, varios términos fueron cambiados por otros, que según el criterio de quienes hacían aquel trabajo resultaban más claros.

Al parecer fue en esa revisión, donde se quitó la palabra “alma” y en su lugar se colocaron otras palabras; como varios de estos párrafos se encuentran en el LVV, es posible encontrarlos allí, y observar de qué forma fueron transformados.

No he hecho ese ejercicio por falta de tiempo, pero me pareció bien el compartirlos con ustedes para que quienes tengamos interés podamos iniciar ese análisis.


Aunque nunca presentó su análisis, es conveniente realizar lo propio para demostrar lo infundada que resulta la teoría que nos ocupa:

El primer párrafo citado por Alfredo dice:

6.15. Muchas veces habéis querido prometerme que me seguiréis y Yo he sellado vuestros labios para que no pronuncien la promesa. Otras, habéis querido escribir jurando que me amaréis y Yo he detenido vuestra pluma, porque quiero que de vuestra ALMA brote el propósito inquebrantable de seguirme.

En el LVV, el párrafo en cuestión aparece de la siguiente forma:

3.72.44 Muchas veces habéis querido prometerme que me seguiréis, y Yo he sellado vuestros labios para que no pronuncien la promesa. Otras habéis querido escribir el juramento de que siempre me amaréis, y Yo he detenido vuestra pluma, porque quiero que sea de vuestro ESPÍRITU del que brote el propósito inquebrantable de seguirme.

En resumen, lo que este párrafo dice es que el juramento de seguir al Padre debe provenir del espíritu, no de la materia, pues Dios no quiere que dicha promesa se reduzca a simples palabras pronunciadas por los labios o escritas en papel.

Lo anterior demuestra que el portavoz utilizó la palabra “alma” como sinónimo de espíritu, lo cual justifica la corrección realizada por los editores del LVV, ya que si de acuerdo con la explicación 50 del “Mundo Espiritual de Luz”, el “alma” es sustancia sutil, sería absurdo que el Padre aquí nos pidiera que el juramento de seguirlo lo realicemos con la materia y no con el espíritu.

La siguiente Enseñanza confirma lo antes dicho:

3.73.20 “Ved que el enemigo más poderoso lo lleváis en vosotros mismos. Cuando lo hayáis vencido, veréis bajo vuestros pies al dragón de siete cabezas del que os habló el apóstol Juan. Entonces será cuando en verdad podáis decir: "Puedo levantar mi faz hacia mi Señor para decirle: Señor, OS SEGUIRÉ" porque entonces no serán los labios los que lo digan SINO EL ESPÍRITU.”

Este párrafo nos confirma que no son las palabras que brotan de los labios las que sellarán el compromiso con nuestro Señor, sino el espíritu. Y esto es así porque si el Espíritu Divino es nuestro Padre, resulta lógico y natural que el compromiso inquebrantable de seguirle lo reclame de sus hijos espirituales, no de la materia.

El siguiente párrafo citado por Alfredo fue el siguiente:

“7.17. Mucha ciencia tiene hoy la humanidad, pero con ella ha creado un mundo extraño que la aparta de lo natural, de la fuente de vida, de los reinos que le he confiado para su conservación y su recreo. ¿Cómo puede el hombre así, ser SANO DE CUERPO Y DE ALMA?”

En el LVV, el párrafo a estudio se lee así:

“3-80-45. Mucha ciencia posee hoy la humanidad pero con ella ha creado un mundo extraño que la aparta de lo que es natural, de la fuente de vida, de los elementos de la Naturaleza que le he confiado para su conservación y recreo. ¿Cómo puede el HOMBRE que así vive ser sano de CUERPO Y DE ESPÍRITU?”

La última parte de este párrafo cuestiona la salud del HOMBRE, entendido como una dualidad de materia y espíritu, por esa razón se justifica la sustitución de la palabra “alma”, pues en el hombre convergen dos naturalezas susceptibles de enfermedad, la material o humana y la espiritual, por eso en el LVV, la enseñanza a estudio dice: “¿Cómo puede el HOMBRE que así vive ser sano de CUERPO Y DE ESPÍRITU?”, lo que además es congruente con el texto de la misma Enseñanza de lque fue tomado ese párrafo, pues líneas antes menciona:

“3-80-44. Vivid en armonía con las leyes naturales y con las leyes espirituales y seréis siempre sanos DE CUERPO Y DE ESPÍRITU.”
Este último párrafo confirma que la esencia de la Enseñanza gira en torno a la salud del cuerpo y el espíritu del hombre, lo que evidencia que el portavoz utilizó la palabra “alma” como sinónimo de espíritu, ¿Acaso al Padre solo podría interesarle la salud del cuerpo y del “alma” (entendida como “materia sutil”), dejando de lado la salud espiritual de sus hijos? Ciertamente, no.

El tercer párrafo citado por Alfredo dice:

“30. A cada uno de vosotros se le ha asignado un número de ALMAS para salvar y conducir. Ninguno llegará sin su porción porque no será
recibido.”

En el LVV ese párrafo quedó así:

“5-135-30. A cada uno de vosotros se le ha asignado un numero de ESPIRITUS a los cuales debe ayudar a elevarse, conduciéndoles por el sendero de mi verdad. Ninguno llegará sin su porción, porque no será recibido.”

Aquí claramente “alma” significa espíritu, pues a lo largo del Tercer Testamento se nos recuerda que a cada uno le será asignada una porción de
espíritus, encarnados o desencarnados para guiarles y ayudarles en su evolución, tal como lo confirman las siguientes Enseñanzas del LVV:

“3-61-4. A cada uno de vosotros le estoy confiando UNA PORCIÓN DE CORAZONES para que los conduzca con su palabra y sus ejemplos; más si en las pruebas flaqueáis ¿Que confianza podréis infundir a VUESTROS HERMANOS acerca de mi enseñanza? Entre las multitudes que os siguen hay corazones de roca que solo con buenas obras lograran conmoverse y convertirse a mi Doctrina.”

3-63-90. ¿Qué responderéis acerca de vuestros pasos cuando lleguéis a la presencia del Señor? Antes sabíais que tendríais que responder cada quien de sí mismo, ahora habéis sabido que de cada uno de vosotros depende una porción de ESPÍRITUS de los cuales también tendréis que
responder.

3-75-20. Llevareis presente que todo cuanto acumulasteis en vuestro corazón, no os fue dado para que lo atesoraseis, sino para que hicieseis conocer mi verdad A VUESTROS HERMANOS, UNA PORCION de los cuales esta asignada por Mi para cada labriego.”

Nótese como en estos párrafos también se emplea la expresión “corazones” para referirse a los espíritus que el Padre asigna a sus labriegos, y a mayor claridad, es de resaltar que en estos párrafos se dice que los “espíritus” o “corazones” que conforman nuestra parcela, son NUESTROS HERMANOS, es decir espíritus, encarnados y desencarnados, razón por la que la sustitución de la palabra “alma” por “espíritu” está totalmente justificada.
Además, se debe tomar en consideración que cuando el párrafo que se analiza dice: “Ninguno llegará sin su porción porque no será recibido”, significa que la “porción” que se nos ha confiado son espíritus, pues tendremos que conducirlos ante al Padre, cosa que no podría suceder si se tratara de “almas”, es decir, seres materiales, pues lo material no llega a Dios.

Otro de los párrafos citados por Alfredo dice:

15.26. ¿No existe luz en vuestro cerebro ni sentimientos en vuestro corazón? ¿No hay un átomo de fuerza en VUESTRA ALMA para levantar vuestra faz ante Mi? Entonces ¿Por qué os contemplo como enemigos si todos habíais brotado de Mí?

Su correlativo en el LVV dice así:

6-145-16. … ¿No existe luz en vuestro cerebro ni sentimientos en vuestro corazón? ¿No hay un átomo de fuerza EN VUESTRO ESPÍRITU para que podáis levantar vuestra faz ante Mí? Entonces ¿Por qué os portáis como enemigos si todos habéis brotado de Mí?

¿Qué significa levantar la faz ante el Padre? ¿A quién está hablando aquí nuestro Señor, al espíritu o a la materia? Evidentemente al espíritu, lo material no llega al Padre, por lo tanto, no podría referirse al “alma” (según se define en la EME 50). Levantar la faz a Dios, significa elevarnos espiritualmente ante Él, cosa que evidentemente no podríamos levantando físicamente nuestro rostro al cielo.

A mayor abundamiento, el párrafo en cuestión dice: “¿No hay un átomo de fuerza EN VUESTRO ESPÍRITU para que podáis levantar vuestra faz ante Mí?”

Este párrafo nos recuerda que nuestro espíritu es átomo de la Divinidad, por tanto, tenemos la potencia y capacidad de elevarnos espiritualmente al Creador, tal como se colige de las siguientes enseñanzas:

1-2-3. … Vosotros sois átomos de mi Divinidad. … De Mi brotasteis y por lo tanto, a Mi volveréis.

• 7-187-16. Este es el tiempo de la luz, todos estáis revestidos de ella. Esta luz hará comprender al hombre que en él existe un átomo de la
Divinidad que es el espíritu, cuya inteligencia guiada por la conciencia, le conducirá a la paz.

Esto corrobora que la sustitución de “alma” por “espíritu” fue adecuada, pues ese átomo de fuerza para elevarnos ante Dios del que habla la Enseñanza, radica en el espíritu, no en la materia.

El siguiente párrafo citado por Alfredo dice:

“34.8. Amados míos que sentís amor hacia ella: Yo escucho la plegaria que brota de vuestra ALMA para ensalzarla, porque sabéis que vuestros labios son torpes para hacerlo, porque los consideráis impuros y preferís cerrarlos.”

Dicho párrafo fue incluido en LVV de la siguiente forma:

“6-154-31. Amados hijos míos: sentid amor hacia Ella. Yo escucho la plegaria que brota de vuestro espíritu para ensalzarla, porque sabéis que vuestros labios son torpes para hacerlo, porque los consideráis impuros y preferís cerrarlos.”
Una vez más se aprecia que el portavoz utilizó la palabra “alma” como sinónimo de “espíritu”, pues a lo largo de LVV, el Padre nos dice que la oración debe realizarse con el espíritu, más que con la materia, tal como lo confirman los siguientes párrafos:

1-21-3. No acostumbréis orar únicamente con palabras, orad con el espíritu.

7-180-85. Velad y orad para que estéis fuertes; pero orad con el espíritu, para que lleguéis a alcanzar y a gozar la comunicación perfecta con el Señor.

Suponer que esta Enseñanza aconseja orar con el “alma”, implicaría que el Padre nos pide orar con la materia, pues el “alma”, según se define en la EME 50, no deja de ser sustancia material.

Otro de los párrafos mencionados por Alfredo establece:

37.5. Todos tenéis dones para ser verdaderos guías de corazones y ALMAS en el futuro, y aun a seres desencarnados que viven en la turbación del espíritu podréis sacar de sus tinieblas guiándolos hacia la luz.

En el LVV dicho párrafo aparece de la siguiente forma:

“6-158-5. Todos tenéis dones para ser en el futuro verdaderos guías de corazones y ESPÍRITUS, y aun a los seres desencarnados que vivan en la turbación, podréis librarlos de sus tinieblas guiándoles hacia la luz.”

Este párrafo corrobora lo dicho en las Enseñanzas anteriores, en las que se nos dice que a cada uno le ha sido asignado una porción de espíritus a quienes guiar. En el caso que nos ocupa, la expresión “guía de corazones y almas”, reitera que Israel tiene la misión de guía de espíritus, encarnados y desencarnados. Téngase presente que en el LVV la expresión “corazones” se emplea como sinónimo de “ser humano”, por lo demás, la sustitución de “alma” por “espíritu” se justifica totalmente, pues si nuestra parcela o porción está conformada por espíritus encarnados y desencarnados, obvio resulta que el portavoz utilizó la palabra alma como sinónimo de espíritu.

El siguiente párrafo que citó Alfredo, dice:

“57.13. Dejad que vuestro corazón llegue a latir al ritmo de mi amor y vuestros hermanos tendrán que reconoceros por LA BLANCURA DE VUESTRA ALMA y la pureza de vuestros sentimientos.”

En el LVV, dicho párrafo se lee de la siguiente forma:

“6-170-22. Dejad que vuestro corazón llegue a latir al ritmo de mi amor y vuestros hermanos tendrán que reconoceros por LA BLANCURA DE VUESTRO ESPÍRITU y la pureza de vuestros sentimientos.”

Recordemos que en el LVV encontramos lecciones que nos hablan de la vestidura blanca del espíritu, es decir, la pureza con la que originalmente fuimos enviados a este plano material, por eso el Padre nos dice:

“12-359-36. La tentación os despoja de la BLANCA VESTIDURA…”

¿Acaso se refiere a la vestidura de la materia, o a la materia misma? Evidentemente no, de hecho, existen Enseñanzas explícitas que nos hablan de la blanca vestidura espiritual:

“8-221-11… Llegue entre mi pueblo del valle espiritual y ahí le prepare, le envolví en mi luz, LE ATAVIÉ CON LA BLANCA VESTIDURA DE LA PUREZA y le envié al mundo a encarnarse nuevamente….

10-298-58…. Llegasteis ante Mí y dijisteis: Señor, cúmplase en mi tu voluntad. Yo os entregué nueva calza, aparte los harapos que me hacíais presente Y ENGALANÉ A VUESTRO ESPÍRITU con una BLANCA VESTIDURA…”

“12-351-79. …. Yo quiero contemplaros libres de ese materialismo y por ello he dejado solamente a VUESTRO ESPIRITU LA BLANCA VESTIDURA.”

El párrafo a estudio nos dice que sintamos en nuestro corazón el amor de nuestro Padre para que nuestros hermanos lleguen a reconocernos por la pureza de nuestros sentimientos, es decir, la vestidura blanca del espíritu, por lo tanto, la sustitución de alma por espíritu se encuentra totalmente justificada, ¿pues qué, acaso los sentimientos y la virtud son atributos de la materia? Ciertamente no.

El siguiente párrafo citado por Alfredo, dice:

“66.15. Ved cómo el amor espiritual no anida en el corazón de los hombres, Ellos aman, pero con un amor egoísta que destruye su propia vida, porque la pasión es como un gusano que corroe los mejores sentimientos. Cuando las pasiones se agitan en el corazón del hombre, ellas llegan a destruir lo bueno que había EN SU ALMA. La pasión es el abismo que se abre a los pies del hombre, porque al arrastrarlo a su fondo, le hace perder la luz y la paz.”

En el LVV, el párrafo en cuestión se lee de la siguiente forma:

“6-162-58. Ved como el amor espiritual no anida en el corazón de los hombres. Ellos aman, pero con un amor egoísta que destruye aun su propia vida, porque la pasión es como un gusano que corroe los mejores sentimientos. Cuando las pasiones se agitan en el corazón del hombre, llegan a destruir todo lo bueno que había EN SU ESPÍRITU. La pasión es el abismo que se abre a los pies del hombre, y que al arrastrarlo a su fondo, le hace perder la luz y la paz.”

En resumen, este párrafo se refiere a la lucha del espíritu con las pasiones de la carne. Comienza diciendo: “Ved como el amor espiritual no anida en el corazón de los hombres” y más adelante señala: “Cuando las pasiones se agitan en el corazón del hombre, llegan a destruir todo lo bueno que había EN SU ESPÍRITU”. Es decir, cuando el espíritu no logra sobreponerse a las pasiones de la carne, éstas acaban por destruir la pureza del espíritu, lo cual es acorde con las Enseñanzas del Libro de la Vida Verdadera, en las que de manera reiterada se nos dice que la lucha del espíritu con su envoltura es de potencia a potencia. Ahora bien, si nos atenemos al párrafo citado por Alfredo en la parte que dice: “Cuando las pasiones se agitan en el corazón del hombre, ellas llegan a destruir lo bueno que había EN SU ALMA”, llegaríamos a la conclusión de que las pasiones de la carne destruyen el “alma”, lo cual es una contradicción, pues si de acuerdo con la EME 50, el alma es la materia sutil que gobierna al cuerpo, resulta entonces que las pasiones del alma son las que destruyen “todo lo bueno que hay en el alma”, lo cual es un absurdo.

El siguiente párrafo que citó Alfredo, dice:

“4. Es que Yo estoy en vosotros, porque SOY EL ALMA QUE LLEVÁIS, la conciencia que poseéis.”

Este párrafo no está incluido en el LVV, no obstante, resulta evidente que cuando el Padre dice que Él es el “alma” que llevamos, se refiere a la conciencia que poseemos, tal como Él mismo lo aclara, pues a continuación dice, “…la conciencia que poseéis”. Recordemos que, conforme al Diccionario, una de las acepciones más comunes de la palabra “alma” es precisamente “Sustancia o parte principal de cualquier cosa” (Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española). En el párrafo que nos ocupa, palabra alma se utiliza para designar la parte más importante de nuestro ser, es decir la chispa Divina en dónde se encuentra nuestro Señor: La conciencia.

El siguiente párrafo confirma lo antes dicho:

“1-10-37. …Mas no vengo a juzgaros por lo que hacéis, sino por la intención con que lo hacéis. YO ESTOY EN VUESTRA CONCIENCIA y más allá de ella. ¿Pensáis que Yo pueda ignorar vuestros actos y la intención de ellos?”

El último párrafo citado por Alfredo dice:

71.8. De donde vengo y a donde voy, vosotros no podéis ir por ahora; mas un día llegaréis a mi presencia y por esta palabra me reconoceréis. Veréis entonces al vencedor de la muerte; al que con su sacrificio os dio vida eterna, porque soy la resurrección y la vida, soy el consuelo que busca a toda ALMA AFLIGIDA.

En el LVV, el párrafo en cuestión se publicó de la siguiente forma:

“7-181-33. De dónde vengo y a donde voy, vosotros no podéis ir por ahora; más vendrá un día en que llegareis a mi presencia y por esta palabra me reconoceréis. Veréis entonces al vencedor de la muerte, al que con su sacrificio os dio vida eterna, porque soy la resurrección y la vida, soy el consuelo que busca a TODO ESPÍRITU AFLIGIDO para darle la paz.”

El párrafo en cuestión dice que vendrá el día en que llegaremos a la presencia del Padre, dónde le contemplaremos y agrega: “Veréis entonces al vencedor de la muerte, al que con su sacrificio os dio vida eterna, porque soy la resurrección y la vida, soy el consuelo que busca a TODO ESPÍRITU AFLIGIDO para darle la paz.”

Evidentemente se refiere a los espíritus, no a la materia, pues el Padre espera el retorno de sus hijos espirituales porque Él es el único que puede darnos el consuelo y paz, y la paz es un espiritual, no material:

114.54 POR LA PAZ QUE SENTÍS EN VUESTRO ESPÍRITU PODÉIS RECONOCER MI PRESENCIA. Nadie más que Yo puede daros la verdadera paz.

En conclusión, los portavoces utilizaron la palabra alma como sinónimo de “espíritu” o “persona”, debido a que son algunas de las acepciones que tiene dicha palabra en nuestro país, lo que explica su eliminación del Libro de la Vida Verdadera.
CESAR
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Re: NATURALEZA DEL ALMA

Mensaje por CESAR »

El Mito de Luzbel.

Primera Parte

1.- ¿Pecamos antes de venir al mundo?

“05-114.36 Podéis dudar de todo lo que os digo, más en verdad aquel valle fue vuestra morada cuando erais espíritu. Fuisteis moradores de aquella mansión en la cual no conocisteis el dolor, en la que sentíais la gloria del Padre en vuestro ser, porque no había mancha en él; mas no teníais méritos, era menester que dejarais aquel cielo y descendierais al mundo para que vuestro espíritu, mediante su esfuerzo, conquistara aquel reino.”

Esta enseñanza desvirtúa el mito de que el espíritu encarnó con el pecado a cuestas, pues claramente se nos dice que, antes de venir al mundo, nuestro espíritu sentía la gloria del Padre porque no había mancha en él, lo que explica que tampoco conociera el dolor, pues no tenía falta alguna que purificar, tal como se infiere de esta Enseñanza cuando dice: “Fuisteis moradores de aquella mansión en la cual no conocisteis el dolor, en la que sentíais la gloria del Padre en vuestro ser, porque no había mancha en él.” También se nos explica que fuimos enviados al mundo material porque en nuestra inocencia carecíamos de méritos para poseer el reino de Dios, el cual solo se conquista mediante la lucha y el esfuerzo, pues textualmente dice: “mas no teníais méritos, era menester que dejarais aquel cielo y descendierais al mundo para que vuestro espíritu, mediante su esfuerzo, conquistara aquel reino.”

“4-104-27. Yo os envié limpios a la Tierra y así retornaréis a Mí, ¡Cuanto tendréis que luchar para recobrar la pureza de que fuisteis dotados!

“Yo os envié limpios a la Tierra y así retornaréis a Mí”, dice la primera parte de esta Enseñanza, lo que confirma que el espíritu encarnó puro y sin mancha alguna, y continúa: “¡Cuanto tendréis que luchar para recobrar la pureza de que fuisteis dotados!”, lo que implica que fue aquí, en el universo material, en dónde el espíritu cometió pecado por primera ocasión, pues el Padre reclama la pureza original con la que nos envió al mundo y por ello nos insta a retornar a Él limpios, tal como llegamos a la Tierra en un principio.

274-53.- “En verdad os digo, que antes que los mundos fuesen hechos y antes de que el hombre apareciese en la Tierra, ya existía vuestro espíritu. Fueron para él épocas de inocencia, toda una vida en aquellas mansiones de preparación, tiempos en que el espíritu fue instruido para habitar la Tierra, encarnándose en el hombre.”

Nótese como en ninguna parte se menciona que el espíritu hubiese pecado antes de venir al mundo, no; el párrafo en cuestión dice que antes de que los mundos fuesen hechos, el espíritu vivió “épocas de inocencia” en las que fue instruido para encarnarse en el hombre. Esto confirma que el espíritu encarnó sin mancha de pecado, pues la Doctrina revela que antes de la creación del Universo, vivimos épocas de pureza y de preparación para la lucha que nos aguardaba en el mundo material.

También es conveniente recalcar que, de acuerdo con esta Enseñanza, “los tiempos de preparación” en los que el espíritu fue instruido para encarnarse en el hombre, comenzaron desde “antes que los mundos fuesen hechos”, lo que significa que, desde sus inicios, nuestro espíritu estaba destinado a encarnar puro, tal como brotó del Padre, dado que antes de la Creación material vivimos “épocas de inocencia”, lo cual se corresponde con la Enseñanza 5-114-36 que dice: “Fuisteis moradores de aquella mansión en la cual no conocisteis el dolor, en la que sentíais la gloria del Padre en vuestro ser, porque no había mancha en él”, lo que significa que el espíritu no cometió pecado antes de encarnar. Estas Enseñanzas desvirtúan el mito de “Luzbel y los “ángeles caídos”, de acuerdo al cual, la Creación material habría sido un evento accidental, consecuencia de un pecado cometido por los espíritus en el Más Allá.

Por lo demás, en el LVV no existe ninguna Enseñanza que revele que lo que motivó al Padre a concebir el Universo material y enviarnos a encarnar en este mundo, fue la comisión de un pecado, eso sería una contradicción, pues la Doctrina enseña que no existen lugares creados por nuestro Señor para expiar faltas a su Ley:

“2-36-52. Tampoco existen lugares creados por Mi expresamente para la expiación de las faltas cometidas por mis hijos.”

¿Acaso no es posible expiar y restituir faltas en el mundo espiritual? Por supuesto que sí, la misma Doctrina nos enseña que el espíritu puede expiar y purificar sus faltas en el Más Allá. Esto desmiente la creencia de que la Creación y nuestra presencia en este plano se deben a un pecado, pues el Padre no concibió el Universo material como un lugar destinado a la expiación de nuestras faltas, sino como un lugar para cosechar méritos y para la evolución de sus hijos, tal como lo enseña el párrafo 05-114.36 cuando dice: “no teníais méritos, era menester que dejarais aquel cielo y descendierais al mundo para que vuestro espíritu, mediante su esfuerzo, conquistara aquel reino.”

Dicho en otras palabras, el Reino de Dios no es gratuito ni se otorga por gracia Divina, se conquista por el esfuerzo y los méritos cosechados en las pruebas que la vida nos ofrece, pues ya lo dice el Padre: “Sin pruebas, no habrá méritos, sin méritos, no podrá haber galardón” [06-149.79].

“8-220-70. Yo soy como un sol, vosotros sois como una chispa de él. Fuisteis creados pequeños para que crecieseis por vuestros méritos desarrollando vuestros dones. Fuisteis puros en un principio, pureza que más tarde manchasteis en las pruebas y en el pecado, porque fuisteis puestos en un camino donde os levantaseis por el esfuerzo de vuestra voluntad, para que en él hicierais méritos y levantaseis cosecha. ¿Qué esfuerzo hubierais hecho por elevaros, si siempre hubieseis habitado en las alturas? ¿Qué anhelo de desarrollaros podría haber en vosotros, si desde el principio hubieseis sido grandes? ¿De qué méritos podría haberos Yo recompensado, si siempre hubieseis sido perfectos? Pero llegasteis a la Tierra y en ella encontrasteis el sentimiento opuesto a la perfección, al bien. Encontrasteis la tentación que induce al mal, la debilidad de la carne, las acechanzas del mundo. Allí comenzó la lucha del espíritu dentro de la envoltura cuya naturaleza era diferente a la suya. El espíritu, desorientado en un principio por el mundo y la Naturaleza de que se veía rodeado, cayó en el letargo, dejando que la materia creciese y obrase de acuerdo con sus condiciones terrenales, con sus pasiones materiales.”

Este párrafo confirma la narrativa de las Enseñanzas anteriores, pues explica que en principio fuimos creados pequeños y puros para que por mérito propio fuéramos creciendo y desarrollando nuestros dones; pureza que más tarde mancillamos en “las pruebas y el pecado”. Ahora bien, ¿en dónde comenzaron y cuáles fueron las pruebas que llevaron al espíritu a pecar? El mismo párrafo nos lo revela: “…llegasteis a la Tierra y en ella encontrasteis el sentimiento opuesto a la perfección, al bien. Encontrasteis la tentación que induce al mal, la debilidad de la carne, las acechanzas del mundo. Allí comenzó la lucha del espíritu dentro de la envoltura cuya naturaleza era diferente a la suya”. Doble abstracción: el libre albedrío y las tendencias de la materia son las pruebas a las que fue sometido el espíritu de la humanidad, por eso el Padre nos cuestiona, “¿Qué mérito tendría vuestro espíritu, si actuara dentro de un cuerpo sin voluntad y sin inclinaciones propias? La lucha del espíritu con su envoltura es de potencia a potencia… (E. 2-53-9)

Por otra parte, debe considerarse que en estas Enseñanzas no existe reclamo o relato algunos que indiquen que las pruebas y el pecado comenzaron en el Más Allá; por el contrario, el Padre pregunta: "¿Qué esfuerzo hubierais hecho por elevaros, si siempre hubieseis habitado en las alturas? ¿Qué anhelo de desarrollaros podría haber en vosotros, si desde el principio hubieseis sido grandes? ¿De qué méritos podría haberos Yo recompensado, si siempre hubieseis sido perfectos? Pero llegasteis a la Tierra…” lo que significa que aquél estado de pureza y bienestar que tuvimos en nuestros inicios por virtud de la inocencia, duró hasta que venimos a encarnar en el ser humano, cuyas inclinaciones pusieron a prueba la virtud y el libre albedrio del espíritu, tal como lo indica la Enseñanza a estudio: “El espíritu, desorientado en un principio por el mundo y la Naturaleza de que se veía rodeado, cayó en el letargo, dejando que la materia creciese y obrase de acuerdo con sus condiciones terrenales, con sus pasiones materiales”.

Ahora bien, “¿Qué esfuerzo hubierais hecho por elevaros, si siempre hubieseis habitado en las alturas?” cuestiona el Creador. La pregunta tiene una doble implicación; la primera es que habitando en las alturas, es decir, en aquella mansión de luz en la que nacimos, el espíritu fue puro e inocente porque no estuvo sujeto a pruebas, razón por la que tampoco precisaba de ningún esfuerzo para mantenerse en la virtud; la otra implicación es que Dios concibió la Creación como un lugar para la evolución y perfeccionamiento de sus hijos, para que a través del propio esfuerzo, fuesen desarrollando sus dones, adquiriendo experiencia y elevación, lo cual echa por tierra el mito de “Luzbel” y la teoría de que el Universo fue creado a partir de un pecado cometido en el Más Allá, pues el Padre nos explica que, habitando en las alturas, es decir, en un ambiente todo amor, ajeno a cualquier otra influencia, no hubiésemos hecho ningún esfuerzo para crecer y desarrollar nuestros dones.


“11-328-19. Entre vosotros están los discípulos que a sí mismos se preguntan: "¿Porque sí nuestro espíritu brotó de un Padre todo amor, toda pureza y perfección, no ha podido mantenerse, ni perseverar en el bien y en la virtud?" El Maestro os contesta: Yo envíe a vuestro espíritu a la Tierra, dotado de todos los atributos que hay en el Padre, y lo formé como hijo semejante a su Creador; le fue confiada una materia para su tránsito sobre la tierra y esa materia fue el principio de pruebas y de lucha para el espíritu, porque la carne es débil; así tenía que ser, frágil, para probar la fortaleza del espíritu.”

“11-328-20. La virtud se manifiesta solamente en la prueba. La luz brilla más en las tinieblas, la luz no brilla en la luz y así, era menester que vuestro espíritu fuese probado y acrisolado, porque vuestro espíritu tiene principio y en su inocencia careció de méritos, careció de experiencia, de desarrollo y de perfección, y a él le fue confiada una baja escala para poder ascender a otra más elevada y así por los siete peldaños de la escala de perfección, hasta llegar como espíritu perfecto y puro a la presencia del Padre, lleno de luz, evolucionado mediante el desarrollo de todos sus dones, perfeccionado en todas sus potencias, colmado de méritos en la lucha, pleno de conocimiento de sí mismo, de su Padre y de la vida, consciente de dónde había brotado, para que había sido creado y a dónde había retornado.”

Nótese como la secuencia de eventos que encontramos en estos párrafos, desde la creación de los espíritus hasta la aparición del pecado, es la misma que observamos en las Enseñanzas anteriores, es decir:

[
  • Primero:el espíritu brotó de un Padre todo amor.

    Segundo: el espíritu fue puro e inocente en un principio, a la vez que careció de “méritos, experiencia y perfección”.

    Tercero: En esas circunstancias, “era menester que el espíritu fuese probado y acrisolado” para que por propio mérito y esfuerzo evolucionara y desarrollara sus dones, pues “La virtud se manifiesta solamente en la prueba.”

    Cuarto: A dichos fines, el Padre envío al espíritu a encarnar y le confió una materia, la cual –dice la Enseñanza- “fue el principio de pruebas y de lucha”, necesarias para su perfeccionamiento, evolución y desarrollo.

    Quinto: La debilidad del espíritu ante las pruebas que la materia le ofrece, es la razón por la que “no ha podido mantenerse ni perseverar en el bien y en la virtud”, es decir, lo que lo llevó a pecar.


Vale destacar que en esta sucesión de eventos tampoco encontramos indicio alguno que nos lleve a suponer que el espíritu pecó antes de venir al mundo, por el contrario, el relato resulta consistente con las Enseñanzas anteriores, pues en este se reitera que el espíritu fue puro y virtuoso antes de encarnar, tal como lo indica la Enseñanza: “La virtud se manifiesta solamente en la prueba. La luz brilla más en las tinieblas, la luz no brilla en la luz y así, era menester que vuestro espíritu fuese probado y acrisolado”, lo que significa que la virtud primigenia del espíritu carecía de méritos ante Dios, porque la pureza que lo engalanaba no la había labrado por su propio esfuerzo, sino que le fue concedida por gracia Divina al brotar del Padre, de ahí la necesidad de someterle a prueba para evolución y perfeccionamiento de sus dones, pues como lo dicen unos proverbios: “nadie sabe de lo que es capaz hasta que lo intenta” y “nunca sabes lo fuerte que eres, hasta que ser fuerte, es tu única opción” , y así, era menester que el espíritu puro e inocente en sus inicios, comenzara a descubrir y desarrollar por sí mismo los dones, facultades y potencias que le fueron entregados por el Padre desde el momento mismo de su nacimiento, a través de las pruebas que la vida material le ofrecería, y de las que solo se puede salir avante, por medio de la fe y esgrimiendo las armas de la espiritualidad, por eso la Enseñanza que nos ocupa dice: “Vuestro espíritu tuvo un principio y en su inocencia careció de méritos, careció de experiencia, de desarrollo y de perfección”; y como lo dice el Padre: “En el camino que se ha marcado a vosotros no hay pruebas que sean inútiles. Todas tienen un fin, que es el de perfeccionar a vuestro espíritu.” (6-148-58).


2-35-48. Escuchad discípulos: Antes de que surgiereis a la vida, Yo ya existía y en mi Espíritu estaba latente el vuestro. Mas no quise que heredaseis mi Reino sin haber hecho méritos; no quise que poseyeseis lo existente sin saber quién os había creado, ni quise que os marchaseis sin rumbo, sin destino y sin ideal.

Éste párrafo, por demás interesante refiere que, aún antes de surgir a la vida espiritual, ya estábamos predestinados a abandonar la casa paterna para ganarnos el derecho a heredar el Reino de Dios por medio de los méritos. En efecto, la primera parte de esta Enseñanza dice: “Antes de que surgiereis a la vida, Yo ya existía y en mi Espíritu estaba latente el vuestro. Mas no quise que heredaseis mi Reino sin haber hecho méritos”, y a continuación dice: “no quise que poseyeseis lo existente sin saber quién os había creado”, lo que significa que, para poseer el Reino de Dios (lo existente), primero tendríamos que conocer al Padre, y para conocerle, se precisa evolución, experiencia y desarrollo espiritual, tal como lo indica la Doctrina: “Si al principio de vuestra evolución espiritual me hubiese mostrado a vuestro espíritu en toda mi grandeza, ¿Que habríais visto, sentido o comprendido? Nada; al sentiros cerca de Mí, hubieseis percibido un vacío infinito, o al querer concebir la profunda verdad, hubieseis encontrado impotente a vuestra razón y débil a vuestro espíritu. Hoy vengo a descorrer otro poco el velo de mi arcano, para que conozcáis algo de vuestro Dios (5-129-5).

Este conocimiento desvirtúa el mito de la supuesta rebelión orquestada contra Dios por algunos espíritus deseosos de “arrebatarle” su Reino, pues si antes de venir al mundo fuimos incapaces de mirar, sentir o comprender al Padre, mucho menos habríamos sido capaces de “usurpar” Su Reino, ya que solo puede ambicionarse lo que se conoce, lo cual no ocurrió, de la misma forma que una rebelión solo puede concebirse contra alguien conocido, lo que tampoco fue así.

Estas Enseñanzas también evidencian la falsedad de la supuesta “Explicación 50 del Mundo Espiritual de Luz”, en la que, entre otras cosas, se dice:

“7. Mas este ángel, viendo su propia hermosura, dejó que se infiltrara en él el orgullo acompañado de la soberbia, y ya no quiso ser menos que Dios; anheló un Universo que regir, donde ser poderoso y ser el rey.”

Por principio, debe saberse que el orgullo y la soberbia son tendencias originarias de la carne, no del espíritu, pero de esto me ocuparé en otra ocasión. El punto que quiero destacar aquí es que, a la Luz del Tercer Testamento, el relato de que hubo una legión de espíritus que no se conformaron con ser menos que Dios resulta inverosímil, pues no se puede pretender ser más grande que alguien a quien ni siquiera somos capaces de concebir, lo que contrasta con el relato de la supuesta “Explicación 50” en la que literalmente se nos da a entender que antes de encarnar conocíamos plenamente a nuestro Creador, dado que nos la vivíamos “circundándolo”, cual cortesanos a un soberano, pues literalmente dice: “antes de que comenzaran los tiempos, hermanos míos: nuestro Padre, en el más allá, estaba circundado por los arcángeles,” creencia que se confirma más adelante en esa misma “explicación” cuando menciona:

“32. “… los primeros hombres escuchaban y contemplaban la faz del Señor.”

¿Cómo es que los hombres de antaño carentes de méritos y evolución pudiesen escuchar y “mirar la faz del Señor”, si el Libro de la Vida Verdadera nos explica que en nuestros inicios ni siquiera hubiéramos sido capaces de mirarle, sentirle o comprenderle?

Regresando al análisis del párrafo que nos ocupa, en su última parte dice: “ni quise que os marchaseis sin rumbo, sin destino y sin ideal” lo que confirma que, desde antes de surgir a la vida, ya estábamos destinados a dejar aquélla mansión paterna, no sin antes haber sido dotados de conciencia, la que nos serviría de guía para conocer nuestro destino y seguir un ideal.

En definitiva, la cosmogonía que explica la creación del Universo a partir de un pecado cometido en el Más Allá, -entiéndase una supuesta “rebelión” orquestada por una legión de espíritus contra Dios- carece de fundamento en el Tercer Testamento, simplemente no hay razón para suponer que así ocurrió, a menos que nos estemos acerquemos a esta Doctrina con una idea ya formada, buscando cualquier punto de apoyo, por débil que sea, para especular vanamente y a riesgo de adulterar las Enseñanzas del Libro de la Vida Verdadera.

¿En dónde surgió el mal?

2-40-81 Sabed que el mal surgió del hombre, de sus flaquezas, y que a medida que fue creciendo en número la humanidad, así como sus imperfecciones y pecados, la fuerza o influencia del mal fue aumentando.

Este párrafo es contundente, EL MAL SURGIÓ DEL HOMBRE, es decir, en el mundo material, y a medida que fue creciendo la humanidad y sus pecados, esa fuerza fue aumentando; no existe contradicción alguna, a lo largo del Tercer Testamento el discurso es el mismo: en nuestros inicios, antes de venir al mundo, nuestro espíritu fue puro e inocente y ya estaba destinado a dejar aquél “cielo” por un mundo de lucha en donde encontraría experiencia, ocasión para desarrollar sus dones y evolucionar; fue aquí en este plano en donde surgió el pecado, y por ende, la fuerza del mal, lo cual desvirtúa la creencia de que el espíritu encarnó habiendo pecado antes en el Valle Espiritual.

No podría cerrar este análisis sin referirme antes a la siguiente Enseñanza:

05-114.57 El pecado ha nacido en el mundo; los espíritus al brotar de Dios, unos permanecieron en el bien, mientras que otros al desviarse de ese camino, crearon uno distinto, el del mal.

Desafortunadamente este párrafo fue adulterado en las últimas ediciones del Libro de la Vida Verdadera, pues no todos los que se dicen espiritualistas estudian la Doctrina, solo profesan, no analizan, solo creen, y así, hay quienes piensan que el mito de “Luzbel” -forjado en el catolicismo-, es legado del Tercer Testamento. Nada más falso.

El citado párrafo fue modificado de la siguiente manera, a fin de alinearlo al mito de Luzbel:

05-114.57 El pecado NO ha nacido en el mundo; los espíritus al brotar de Dios, unos permanecieron en el bien, mientras que otros al desviarse de ese camino, crearon uno distinto, el del mal.

Ojalá pronto se corrija este error.
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